Sayyed Hassan Nasralá señaló que los pocos minutos de la película ofensiva mostrados han confirmado el carácter insultante de la misma contra el Profeta, el Santo Corán y el Islam como religión.
El secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá, señaló que los pocos minutos de la película ofensiva (la Paz sea con él) mostrados han confirmado el carácter insultante de la misma contra el Profeta, el Santo Corán y el Islam como religión, haciendo hincapié en que este nivel de insulto es muy grave y sin precedentes.
“Lo que estamos presenciando hoy es muy grave, y lo peor es la insistencia de los sitios web de Internet de seguir haciendo circulando la película,” dijo Su Eminencia durante un discurso televisado en Al-Manar el domingo por la noche.
Criticando la película blasfema, Sayyed Nasralá añadió: “Creo que lo que está sucediendo es más grave que la quema de Al-Aqsa en 1969, y mantener silencio con este nivel de insulto en contra del Mensajero de Dios sería un asunto muy peligroso”.
“Si la Ummah (Nación) Islámica tolera el insulto contra sus profetas transmite un mensaje equivocado a los israelíes en el sentido de que ellos pueden destruir Al-Aqsa,” dijo Sayyed Nasralá, que hizo hincapié en la necesidad de exigir responsabilidades por este delito.
Él indicó que con el fin de hacer frente a cualquier agresión militar, política, intelectual o económica contra una nación, hay que trabajar en dos vías.
La primera es conocer los objetivos enemigos, trabajar para frustrarlos y evitar que el agresor los alcance. La segunda es evitar totalmente una repetición de la agresión. Él señaló, en este sentido, que uno de los objetivos principales de la mencionada película es provocar un enfrentamiento entre musulmanes y cristianos.
Sayyed Nasralá expresó su satisfacción por el hecho de que los líderes religiosos y políticos de los países islámicos han abordado este tipo de incidencias de una forma tal que ha llevado a que sus pueblos dirijan su ira hacia las políticas de EEUU y no hacia los cristianos. Él indicó que la agresión ha sido deliberadamente atribuida por varios medios a los coptos egipcios, que fueron acusados de promover el estallido de una lucha sectaria en Egipto. Sin embargo, cuando los líderes religiosos coptos se apresuraron a denunciar la película, “este objetivo del enemigo –el de crear un enfrentamiento de tipo religioso- quedó frustrado de manera decisiva”.
“Los que hicieron la película sabían que los musulmanes se enfurecerían por ella, y atribuyeron su autoría a los cristianos con el fin de causar conflictos entre musulmanes y cristianos. Israel quiere ver a los musulmanes matar a cristianos y quemar sus iglesias.”
“Sin embargo, los musulmanes han dirigido su ira contra EEUU e Israel, y no contra los cristianos, lo cual es una señal positiva”, afirmó.
Su Eminencia añadió que el mundo musulmán pidió al gobierno de EEUU que detuviera la circulación de esas escenas ofensivas, pero el gobierno de ese país no ha hecho nada”, lo que “ofrece otro testimonio de su hipocresía, engaño y doble rasero en el tratamiento de los temas.”
Sayyed Nasralá afirmó que el mundo musulmán tiene una gran cantidad de evidencias de este doble rasero y mencionó el enjuiciamiento de varias personalidades y escritores únicamente porque han mostrado su escepticismo en el tema del Holocausto. A este respecto, él recordó que la Administración norteamericana ha tomado muchas iniciativas para luchar contra el antisemitismo como ideología.
“¿No merecen los musulmanes - los seguidores de esta Gran religión - tener el mismo nivel de defensa (que los judíos) y que leyes similares sean aprobadas a su favor?”, señaló.
Sayyed Nasralá subrayó que el organizar manifestaciones y protestas y luego volver tranquilamente a casa no era suficiente aquí.
“Debemos asumir la responsabilidad histórica de toda la Ummah Islámica y de los cristianos honorables que cree en la convivencia, y trabajar para elaborar una legislación internacional que tipifique como delito la difamación de las religiones divinas y los profetas, al menos y en especial a Abraham, Moisés, Jesús y Muhammad”, dijo Sayyed Nasralá, que señaló que las comunidades musulmanas en EEUU tienen una responsabilidad muy seria y especial en lo que respecta a este asunto.
Sayyed Nasralá subrayó también que el incidente requiere una sesión urgente de la Organización de la Conferencia Islámica.
“Se trata del Islam. Me pregunto por qué muchos de Vds. no mueven un músculo”, dijo refiriéndose a los dirigentes de los países árabes e islámicos, y añadió: “Tenemos que decir a nuestros gobernantes: es vuestra responsabilidad”. “Juro que si la película hubiera insultado a uno de los reyes árabes, habríais visto como expresaba su ira claramente”, señaló.
Pidiendo una reacción oficial
El secretario general de Hezbolá manifestó también que el Líbano puede jugar un papel fundamental en esta confrontación. “El Líbano preside la Liga Árabe y es miembro de la Asamblea General de la ONU.”
“Le digo a Suleiman (presidente libanés), Berri (presidente del Parlamento) y Miqati (primer ministro) y a los bloques políticos del 8 y del 14 de Marzo que el Líbano puede enviar un mensaje global”, dijo Su Eminencia, que pidió asimismo al gobierno iraquí que convoque una cumbre de la Organización de Cooperación Islámica, que preside en la actualidad, para tipificar como delito el insulto a las religiones divinas.
“Los gobiernos deben entender que sus intereses en el mundo árabe e islámico están vinculados a su respeto por los símbolos religiosos de los árabes y musulmanes”, dijo Sayyed Nasralá. Él pidió además a los musulmanes que llenen las calles de todas las ciudades del mundo en protesta. “Debemos continuar con las protestas populares para detener la película, impedir su circulación y sancionar a los responsables”, indicó.
Al final de su discurso televisado, Sayyed Nasralá hizo un llamamiento en favor de una amplia participación en las manifestaciones organizadas en todo el Líbano en los próximos días para defender al Santo Profeta del Islam, el hombre de mayor moralidad de la historia. Él pidió a los libaneses que respondan a la llamada del abuelo del Imam Hussein –el Profeta Muhammad (la Paz sea con él)- como si contestaran a la pregunta del Imam: “¿Hay alguien que pueda permanecer a mi lado?”.
Él pidió una participación masiva en la manifestación del lunes en Dahiyeh, que tendrá lugar a las 17:00 hora de Beirut, y añadió que el mundo debe darse cuenta de que “el Mensajero tiene seguidores que nunca se mantendrán en silencio ante el insulto”.