La presidenta de Brasil ha expresado una vez más su oposición a cualquier ataque militar contra las instalaciones nucleares de Irán, y advirtió que una acción de ese tipo tendría graves repercusiones.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha expresado una vez más su oposición a cualquier ataque militar contra las instalaciones nucleares de Irán, y advirtió que una acción de ese tipo tendría graves repercusiones para la región.
“Tal acción podría tener consecuencias nefastas para la región y más allá”, dijo Rousseff en un discurso a la III Cumbre de América del Sur y Países Árabes (ASPA) en la capital peruana de Lima.
Ella expresó su preocupación por la presión en favor de un ataque contra los sitios nucleares de Irán, aunque no mencionó a Israel por el nombre.
El 28 de septiembre, Rousseff advirtió que cualquier acción militar unilateral contra Irán violaría la Carta de las Naciones Unidas.
“Estoy particularmente preocupada por la creciente retórica acerca de una acción militar unilateral en Irán”, dijo Rousseff después de una reunión con el primer ministro británico, David Cameron.
“Cualquier iniciativa de este tipo supondría una violación de la Carta de las Naciones Unidas, con graves consecuencias para Oriente Medio”, agregó.