Los resultados de los comicios municipales muestran hoy el avance de los partidos de Trabajadores y Socialista frente a las tradicionales formaciones, como el Movimiento Democrático Brasileño y la Social Democracia.
Los resultados de los comicios municipales muestran hoy el avance de los partidos de Trabajadores (PT) y Socialista (PSB) frente a las tradicionales formaciones, como el Movimiento Democrático Brasileño (PMDB) y la Social Democracia (PSDB).
El PT, la agrupación de la presidenta del país, Dilma Rousseff, y del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, incrementó su respaldo popular y ganó en mas alcaldías que en el 2008, lo cual evidencia su fortaleza, de cara a los futuros comicios presidenciales del 2014.
Según el Tribunal Supremo Electoral (TSE), los candidatos del PT triunfaron en 626 municipios, contra 550 obtenidos en la primera vuelta de las municipales de hace cuatro años y sumaron 17,2 millones de votos.
En la segunda vuelta comicial, prevista para el próximo día 28 en 50 jurisdicciones con más de 200 mil habitantes, la agrupación de Lula participará en 22 de esos municipios. El PMDB y PSDB lo harán con 16 pretendientes cada uno.
Los resultados reflejan un crecimiento del PT del 14 por ciento con respecto al 2008 y se registran a pesar de la campaña de acusaciones contra los dirigentes de esa organización por el presunto desvío de fondos públicos durante la administración de Lula.
En el escenario político, la tienda de los Trabajadores redujo sus diferencias con sus aliados del PMDB y sus opositores del PSDB. El partido del Movimiento Democrático Brasileño recibió 16,7 millones de votos y el otro consiguió 13,9 millones de papeletas.
Los tradicionales ganadoras en estas elecciones, El PMDB y el PSDB conquistaron el domingo último mil 19 alcaldías y 693, respectivamente, lo cual constituye un decrecimiento si se compara con las cifras de hace cuatro años cuando lograron mil 193 y 787.
Otras agrupaciones, como los Demócratas (DEM) y los Progresistas (PP) alcanzaron menos votos y alcaldías en esta ocasión.
La gran sorpresa de estos comicios fue, sin embargo, la formación Socialista Brasileña (PSB) que venció en 433 municipios, lo que representa un ascenso del 40 por ciento con respecto a hace cuatros años.
Aliado del gobierno, el PSB creció en más de 100 alcaldías y se apoderó de plazas capitales como Belo Horizonte, en el estado de Minas Gerais y Recife, en Pernambuco.
Para analistas y políticos, las elecciones del domingo constituyeron un termómetro para medir el respaldo del Ejecutivo y la influencia y fortaleza de los partidos políticos, con miras a los comicios del 2014.