Una gran mayoría de los israelíes han expresado su profunda preocupación por el posible colapso de su economía en crisis, según muestra una encuesta.
Una gran mayoría de los israelíes han expresado su profunda preocupación por el posible colapso de su economía en crisis, según muestra una encuesta.
Un 75 por ciento de los israelíes temen que su economía pueda derrumbarse, una cifra muy superior a la de 2010, según los resultados de una encuesta realizada por la organización de ayuda humanitaria israelí Latet.
La encuesta también indica que el 78 por ciento de los encuestados cree que el régimen de Tel Aviv no tiene planes para combatir la pobreza y reducir la creciente brecha social.
La maltrecha economía del régimen israelí también ha hecho mella en la política.
El 15 de octubre, los parlamentarios israelíes votaron para disolver el Knesset y celebrar elecciones anticipadas en enero de 2013, en lugar de la fecha inicialmente prevista de octubre.
La decisión fue tomada después del bloqueo provocado por las disputas entre los diferentes socios de la coalición en relación a la aprobación del presupuesto de 2013, que contiene duras medidas de austeridad.
En los últimos meses, los israelíes han llevado a cabo protestas contra un paquete de radicales recortes que el régimen del primer ministro Benyamin Netanyahu afirma son necesarios para reducir el déficit presupuestario y proteger la economía.
“Deseo convocar elecciones para el martes 22 de enero de 2013”, dijo Netanyahu a la Knesset al comienzo de un debate el 15 de octubre.
Netanyahu ha creado comités para atender las demandas de los manifestantes anti-austeridad, pero las organizaciones convocantes de las protestas han señalado que no se ha dado ningún paso concreto en este sentido.
Según las cifras publicadas por la Oficina Central de Estadísticas de Israel el martes, el 31 por ciento de los israelíes están en riesgo de caer en la pobreza frente al 27% de 2000.