La mayoría de los judíos en Israel apoyan el establecimiento de un régimen de apartheid si Israel se anexiona formalmente Cisjordania.

La mayoría de los judíos en Israel apoyan el establecimiento de un régimen de apartheid si Israel se anexiona formalmente Cisjordania. Una mayoría también se muestra a favor de la discriminación ejercida contra los ciudadanos árabes israelíes que viven los territorios ocupados en 1948, según señala el diario Haaretz.

La encuesta, realizada por Diálogo en la Víspera de Rosh Hashanah -un grupo de activistas por la paz y los derechos civiles liderado por el profesor universitario de Tel Aviv Camil Fuchs- expone que la mayoría de judíos israelíes apoyan tesis ultranacionalistas y abiertamente racistas en contra de los no judíos. La encuesta fue encargada por el Fondo Yisraela Goldblum y está basada en 503 entrevistas.

La mayoría de los judíos, un 59%, quiere preferencia para los judíos con respecto a los árabes en la admisión a los trabajos en los ministerios. Casi la mitad, un 49%, quiere que el estado trate a los judíos mejor que a los árabes. El 42% no quiere vivir en un edificio donde residan árabes y otro número similar no quiere que sus hijos vayan a clase con niños árabes.

Un tercio de los judíos quiere una ley que prohíba a los árabes israelíes votar para el Knesset, aunque tengan la nacionalidad israelí, y una gran mayoría, un 69%, se opone a dar a los 2,5 millones de palestinos que viven en Cisjordania el derecho al voto, si Israel se anexiona este territorio.

Un 74% de los israelíes quiere carreteras separadas para los israelíes y palestinos en Cisjordania. De ellos, el 24% creen que la prohibición a los árabes de circular por las carreteras donde circulen los judíos es una “buena situación” y el 50% restante que es una “situación necesaria”.

El 47% por cierto quiere que los árabes israelíes –la población árabe que reside en los territorios de 1948 y tiene nacionalidad israelí- sean expulsados hacia Cisjordania. Un 36% apoya que las ciudades árabes de Israel sean transferidas al control de la Autoridad Palestina, a cambio de mantener algunos asentamientos judíos dentro de Israel, en caso de un acuerdo de paz.
Además, la mayoría de los judíos (58%) creen ya que Israel practica un régimen de apartheid de hecho contra los árabes. Sólo el 31% cree que un sistema tal no está en vigor.

Por áreas de población, los judíos ultraortodoxos son los más racistas contra la población árabe. Una amplísima mayoría (el 83%) de los haredim está a favor de carreteras segregadas y un 71% apoya la expulsión de la población árabe. El 70% de ellos quieren prohibir votar a los ciudadanos árabes israelíes y el 95% defiende la discriminación contra los árabes en los lugares de trabajo.

Los israelíes no religiosos son los menos racistas –a un 68% de ellos no le importaría tener vecinos árabes en su edificio y a un 73% no le molestaría que sus hijos tuvieran compañeros de colegio árabes. Un 50% tampoco apoya que los árabes sean discriminados en los lugares de trabajo.

El autor israelí Gideon Levy señaló también en un artículo publicado en Haaretz que la encuesta ofrece “una imagen desnuda de la sociedad israelí, una sociedad muy enferma que presenta a la mayoría de los israelíes como ultranacionalistas y abiertamente racistas sin que además sientan culpa por ello.”

Él añade que si una encuesta realizada en Europa diera resultados como éstos referidos a los judíos, Israel y las organizaciones judías pondrían el grito en el cielo. “Sin embargo, a Israel las normas no se aplican,” señaló.

Para Lévy la encuesta arroja un futuro amenazador. “La encuesta dice (a los israelíes): Queríais asentamientos, queríais la ocupación, queréis a Netanyahu y no habéis hecho nada para apoyar la solución de dos estados, que está ya muerta. Ahora veremos cuál es la alternativa… La alternativa, como cada niño conoce, es un solo estado. ¿Un estado? La mayoría de los israelíes dicen que será un estado del apartheid y no están haciendo nada para prevenirlo. Algunos incluso lo quieren. Ellos no se preguntan: ¿Adónde vamos? ¿Adónde nos llevan? ¿Cuál es la visión para los próximos 10 y 20 años? Bien, si todo continúa bien, de la forma que va ahora, los israelíes saben la respuesta y está ciertamente es amarga”.

“Los valores, la moral, la democracia, el Derecho Internacional”, eso son para los antisemitas, no para nosotros. Nosotros votaremos otra vez por Netanyahu, que recita que somos la “única democracia en Oriente Medio” y “que se queja de que el mundo entero está contra nosotros”.