La policía israelí se desplegó el domingo en el barrio palestino de Silwan, en el Jerusalén Este ocupado, después de que el alcalde israelí de la Ciudad Santa aprobara el proyecto de expulsión de los
La policía israelí se desplegó el domingo en el barrio palestino de Silwan, en el Jerusalén Este ocupado, después de que el alcalde israelí de la Ciudad Santa aprobara el proyecto de expulsión de los habitantes árabes de dos inmuebles de esta zona que vive bajo una tensión permanente.Uno de los edificios en cuestión, bautizado Beit Yonatan, estaba ocupado por colonos judíos, mientras que el otro inmueble, donde reside una familia árabe, ha sido reclamado por una asociación ultranacionalista judía, Ateret Cohanim, bajo el pretexto de que una antigua sinagoga yemení se hallaba en el sitio.
Ateret Cohanim ha adquirido tierras y viviendas en los barrios palestinos de Jerusalén Este, conquistada y anexionada en 1967, a fin de instalar allí a judíos israelíes.
La situación comenzó a degenerar el pasado año cuando la municipalidad israelí de Jerusalén desveló un proyecto de parque de temática bíblica. El plan, denominado “Jardín del Rey”, prevé la destrucción de 22 viviendas palestinas.