Según varios analistas económicos, el dólar estadounidense podría sufrir una fuerte caída de su valor en 2013 si China se niega a financiar la creciente deuda estadounidense.
Según varios analistas económicos, el dólar estadounidense podría sufrir una fuerte caída de su valor en 2013 si China se niega a financiar la creciente deuda estadounidense.
Refiriéndose a la reciente ley de impuestos y a la deuda de EEUU, uno de estos analistas, Max Keiser, dijo en una entrevista el jueves con Press TV que cuando EEUU se endeuda más de lo que es capaz de pagar mediante la recaudación de impuestos, la diferencia es pagada y financiada por China.
El apoyo de China a la deuda de EEUU ha convertido a este último país en la peor economía del G-20 en términos de la brecha entre los ingresos y los gastos, señaló. También ha aumentado la dependencia económica estadounidense del país asiático.
Keiser cree que en 2013 “el dólar se derrumbará porque China dejará de financiar la deuda de EEUU y éste es el riesgo del que estamos hablando, un riesgo del cual (el presidente Barack) Obama no informa a su población, lo cual es intolerable”.
El analista dijo que EEUU se dirige a una “economía hiperinflacionaria” como consecuencia de la catástrofe causada por “los estadounidenses muy ricos”.
También advirtió de un inminente neo-feudalismo en la economía mundial, donde hay una “increíble disparidad” entre los más ricos y el público en general.
El miércoles, Obama promulgó el Acta de Alivio al Contribuyente Estadounidense de 2012” para evitar el llamado “abismo fiscal”.
El 1 de enero, la Cámara de Representantes votó por 257 votos contra 167 la aprobación del proyecto de ley, que conlleva una elevación de impuestos a los estadounidenses más ricos, mientras exime a otros que ganan menos de 450.000 dólares al año.
También pospondrá recortes presupuestarios por valor de 109.000 millones de dólares durante dos meses.
La Oficina de Presupuestos del Congreso, bajo influencia de los republicanos, ha criticado el proyecto de ley, diciendo que añadiría casi 4 billones de dólares más al déficit federal, ya que el acuerdo “conserva los derechos de casi todos los estadounidenses con tasas impositivas bajas”.
El Fondo Monetario Internacional dijo, por su parte, que el proyecto de ley es demasiado limitado para lidiar con los graves problemas financieros de EEUU.