El Centro de Estudios Estratégicos de Israel, cuya sede se encuentra en el Jerusalén Este ocupado (Al Quds), no cree que el derrocamiento del régimen de Assad sea fácil o incluso posible.
El Centro de Estudios Estratégicos de Israel, cuya sede se encuentra en el Jerusalén Este ocupado (Al Quds), no cree que el derrocamiento del régimen de Assad sea fácil o incluso “posible”.
“La ubicación estratégica de Siria, la unidad en las filas del ejército nacional y la popularidad de Assad a pesar de todos los problemas están impidiendo su derrocamiento”.
En su artículo, Jacques Neriya, experto en cuestiones de Oriente Medio y ex asesor del ex primer ministro Isaac Rabin, destacó que: “Después de los abusos cometidos por los rebeldes, Assad goza de gran popularidad en el país, su ejército está unido y fuerte y sigue controlando las ciudades”. Y agrega: “La oposición está muy dispersa y en esas circunstancias, la caída de su régimen nos parece difícil de lograr”.
Neriya continúa: “El ejército es leal a Assad y sigue, a pesar de la pérdida de algunos territorios, controlando las grandes ciudades y las instituciones públicas del país”.
“El Ejército Sirio Libre (ESL) intentó implicarse en combates urbanos y no ha avanzado una sola pulgada. Todo lo que ha podido reunir en un combate ha sido un batallón de 300 hombres, lo cual es absolutamente insuficiente para superar al régimen”.
Para el autor, “la ayuda turco-árabe a la rebelión no resulta decisiva, aunque el apoyo occidental a los rebeldes pueda jugar un papel importante”.
“De hecho, desde hace 22 meses, la oposición no ha podido atraer a la mayoría de la población y sufre profundas divisiones”.
El ESL se apoya cada vez más en Al Qaida y el apogeo de la disensión interna ha estado marcado por la muerte de Walid al Santush, jefe de la milicia de salafistas que se había autoproclamado emir de Homs”.
A continuación, Neriya destaca la desconfianza de la mayoría de los sirios hacia los opositores externos para concluir que el escenario libio es imposible de repetir en Siria”.