El Estado Mayor de las fuerzas armadas rusas sigue de cerca la situación en torno al tema de los misiles tierra-aire Patriot que la OTAN ha desplegado en Turquía, cerca de la frontera siria.
El Estado Mayor de las fuerzas armadas rusas sigue “de cerca” la situación en torno al tema de los misiles tierra-aire Patriot que la OTAN ha desplegado en Turquía, cerca de la frontera siria, dijo el miércoles en Bruselas el jefe del Estado Mayor General ruso, Valeri Gerasimov.
El Estado Mayor General “sigue de cerca la evolución de la situación (...) Cualquier acumulación de armamentos, especialmente en los focos de tensión, crea riesgos adicionales,” dijo el general Guerassimov al final de una reunión del Consejo Rusia-OTAN a nivel de jefes de los Estados Mayores.
“Nuestros socios del Estado Mayor de la OTAN afirman que estos misiles de tierra-aire no se utilizarán para crear zonas de exclusión aérea en Siria,” señaló el jefe del Estado Mayor General.
Rusia está también preocupada por la intención de algunas fuerzas extranjeras de resolver el conflicto por la fuerza (...). “En nuestra opinión, los sirios deben resolver sus propios problemas. Una injerencia extranjera puede tener consecuencias catastróficas para toda la región”, agregó.
“Existe también el peligro de que estas armas y estos dispositivos puede ser el objetivo de provocaciones,” dijo el general.
El 21 de noviembre de 2012, Turquía pidió formalmente a la OTAN que proporcione sistemas antiaéreos Patriot para proteger sus 900 km de frontera con Siria. El 4 de diciembre, el Consejo de la OTAN dio una respuesta positiva a la petición de Ankara. En total, seis baterías de Patriot de Alemania, Holanda y EEUU se desplegarán en la frontera entre Turquía y Siria y estarán operativos desde finales de enero.