Varias facciones extremistas del campo palestino de Ein el Helwé, en el sur de Líbano, están a punto de anunciar la creación de una rama de la milicia de Al Qaida que opera en Siria: el Frente al Nusra.
Varias facciones extremistas del campo palestino de Ein el Helwé, en el sur de Líbano, están a punto de anunciar la creación de una rama de la milicia de Al Qaida que opera en Siria: el Frente al Nusra. Los representantes de las milicias siguientes: Batallón Abdulá Azzam, Fath el Islam y Yund ash Sham se han reunido para ponerse de acuerdo sobre la fecha del anuncio.
El periódico libanés Al Ajbar enumeró a algunos de los reunidos, entre ellos Haizam y Mohammad Saadi, Bilal Badr, Ossama Shehabi, Mayid el-Mayid, un saudí y dos sirios.
En uno de sus encuentros, ellos condenaron a los dos movimientos islamistas palestinos más antiguos en el campo, Usbat al Ansar y el Movimiento Islámico Yihadista, por sus posiciones moderadas y sus vínculos con los servicios de inteligencia del Ejército libanés y con Hezbolá.
En lo que se refiere al liderazgo del grupo, por el momento el cerebro del mismo es Shehabi y su líder espiritual es Taufiq Tahai. Los dos comandan unos cinco o seis grupúsculos sobre el terreno. Otro líder célebre es Bilal Badr, mencionado varias veces por los medios. Él dispone de unos 20 milicianos y se hizo famoso por sus amenazas de vengar la muerte de siete milicianos del campo caídos en Siria.
Estos milicianos intentan expulsar del campo a las organizaciones pro-sirias presentes en el campo como el Frente Popular de Liberación de Palestina (Mando General) y Al Saika para lo cual llevaron a cabo ataques contra sus sedes y presionaron a sus miembros para que abandonaran el lugar. Militantes del movimiento palestino Fatah también han sido atacados y su armamento confiscado.
Según el diario libanés, estos grupos desean convertirse en la prolongación del Frente al Nusra de Siria y declarar Líbano como una “tierra de yihad”, pero tal anuncio depende únicamente de que obtengan armamento suficiente para controlar las áreas donde las milicias están implantadas.
“El 50% de la superficie del campo está en sus manos, mientras que el 50% restante está bajo el control de las otras facciones reunidas”, señala el periódico.
Los extremistas no desean limitar el anuncio al campo de Ein el Helwé, sino que quieren extenderlo a otros, como el de Bury el Baraineh, situado en el Suburbio del Sur de Beirut, es decir, en el corazón del feudo de Hezbolá y en las proximidades del aeropuerto de la ciudad.