El rumor que circulaba sobre las malas condiciones de salud del secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrala no cumplió las expectativas que se esperaban en Israel.

El rumor que circulaba sobre las malas condiciones de salud del secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasrala no cumplió las expectativas que se esperaban en Israel y ha demostrado ser sólo un episodio más de una guerra psicológica que Sayyed Nasralá ha logrado volver contra sus autores, como sucedió anteriormente otras veces en el pasado.

Tan pronto como Sayyed Nasralá dio comienzo a su discurso televisado en directo el miércoles, los canales israelíes interrumpieron sus programas para transmitir la noticia de la aparición de Su Eminencia, a través de la cual él proporcionó de forma indirecta una prueba de su buena salud.

“Él parece estar muy bien. Esto demuestra que todo lo que se ha dicho acerca de su salud era falso,” dijo Tzvi Yehezkeli, un experto israelí en temas árabes.

Los medios sionistas han señalado que Sayyed Nasralá ha convertido los rumores -difundidos por Turquía, Arabia Saudí y Qatar- en una victoria mediática.

“Él (Sayyed Nasralá) tiene la capacidad de convertir cualquier cosa hostil en su contra en un apoyo real,” dijo Yaron, un corresponsal sionista.

“Incluso aunque no soy un doctor puedo decir que está muy lejos de estar enfermo. Él ha convertido los rumores en una victoria mediática. Turquía, Qatar y Arabia Saudí eran los que estaban detrás de los rumores. Él ha salido victorioso de esta batalla,” añadió Yehezkeli.

Sin embargo, los analistas sionistas creen que el punto más importante en favor de la entidad sionista es que la oposición siria está enfrentándose a “un fuerte enemigo de Israel”, es decir, Hezbolá.