La presidenta argentina Cristina Fernández de Kichner ha calificado el reciente referéndum realizado por Gran Bretaña en las Islas Malvinas de parodia.
La presidenta argentina Cristina Fernández de Kichner ha calificado el reciente referéndum realizado por Gran Bretaña en las Islas Malvinas de “parodia”. Ella señaló que no existe ningún país en el mundo que reconozca la soberanía británica sobre las Malvinas y que incluso EEUU ha señalado que existe un conflicto sobre la soberanía en relación a las islas. Ella añadió que desde 1965 la Asamblea General de la ONU ha reconocido que el tema de las Malvinas es un caso de descolonización.
Estas declaraciones coincidieron en el tiempo con una afirmación del primer ministro británico, David Cameron, que dijo que Londres estaría siempre dispuesto a defender a sus colonos en las Malvinas. En una columna escrita en el periódico The Sun -propiedad del magnate Robert Murdoch- Cameron dijo que mientras que los habitantes de las islas “quieran seguir siendo británicos, estaremos siempre ahí para protegerles. Tienen mi palabra de ello”.
Los 3.000 colonos británicos votaron los pasados días 10 y 11 de Marzo en el referéndum, donde la cuestión era si querían seguir siendo parte del Reino Unido o no. Tal y como se esperaba, el resultado fue de un 99,8% de votos favorables a continuar formando parte de ese país.
Por su parte, Argentina señaló que tal referéndum no era sólo ilegal sino también irrelevante ya que la Asamblea General de las Naciones Unidas no ha reconocido la soberanía británica sobre el territorio.
El Reino Unido estableció su presencia en las Malvinas en 1833 tras invadir dichas islas argentinas y envió a colonos a habitarlas. Londres mantiene una base naval permanente en las islas con más de 1.000 militares estacionados en ella, un soldado por cada tres habitantes. Asimismo, ha concedido licencias para la explotación de los recursos petrolíferos y los pesqueros de la zona.
Las autoridades argentinas han venido reclamando la devolución del territorio. La embajadora argentina en el Reino Unido, Alicia Castro, ha señalado que Londres “no tiene ninguna base política o legal” para justificar su ocupación de las islas. “El referéndum es una consulta realizada por los británicos para que otros británicos puedan decir que el territorio debe seguir siendo británico,” señaló, añadiendo que el conflicto era “una disputa sobre la soberanía no resuelta” y “no tiene nada que ver con el derecho de un grupo de población a la autodeterminación”.
Campaña popular
Por su parte, el pueblo argentino ha aprovechado la ocasión del referéndum para hacer oír de nuevo su condena y rechazo a la ocupación de las islas. Miles de argentinos se reunieron en la capital, Buenos Aires, el 11 de Marzo, día en que fue lanzada una campaña a nivel nacional para recoger un millón de firmas en contra del referéndum y a favor de la soberanía argentina.
Todo tipo de personas, incluyendo veteranos de guerra, estudiantes y artistas, se reunieron junto al monumento del Obelisco de Buenos Aires señalando que los territorios del Atlántico Sur pertenecen a Argentina y que los dos lados deben alcanzar un acuerdo pacífico para la devolución de los territorios al país latinoamericano.
La campaña fue iniciada por la organización Pueblos por las Malvinas. “Nosotros sabemos que Gran Bretaña se apoderó de casi la mitad del mundo en aquel tiempo. Ésa es la verdad. No tenemos más opción que el diálogo,” dijo Diego Rodríguez, miembro de Pueblos por las Malvinas. Él añadió que las firmas serán enviadas a la ONU en junio.
Por su parte, el historiador argentino Federico Lorenz ha señalado que “los británicos han intentado presentarnos como intransigentes y beligerantes, pero la verdad es que hasta la guerra de 1982 y después, ha sido Argentina la que ha pedido negociaciones, pero ellos se han negado”.
Argentina ha ganado también el apoyo de sus socios latinoamericanos en su reivindicación sobre las Malvinas. La CELAC ha defendido públicamente la postura de Argentina y sus socios en el Mercosur -Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela- han prohibido que los buques que lleven bandera de las islas atraquen en sus puertos en solidaridad con Argentina.