La política del gobierno británico de ceder ante las demandas del opresivo régimen de Bahrein ha hecho que muchos estudiantes bahreiníes estén sintiendo también la represión lanzada por su régimen
La política del gobierno británico de ceder ante las demandas del opresivo régimen de Bahrein, liderado por el Rey Hamad bin Isa bin Jalifa, ha hecho que muchos estudiantes bahreiníes que residen en el Reino Unido estén sintiendo también la represión lanzada por su régimen incluso en las calles de Londres, muy lejos de las fronteras de la pequeña isla del Golfo Pérsico.
Según diversos reportajes, el régimen de los Al Jalifa ha lanzado varios intentos de acabar con las protestas de los estudiantes bahreiníes que residen en Londres gracias a la luz verde que los servicios de seguridad de Bahrein han recibido del gobierno británico, pese a las afirmaciones de los políticos de la coalición liderada por David Cameron de que apoyan los cambios democráticos en Bahrein.
La pasada semana, las fuerzas de seguridad de Bahrein organizaron asaltos de las viviendas de aquellas personas que tienen parientes el Reino Unido y les amenazaron con detenerles y encarcelarles si sus hijos y parientes que estudian en ese país participaban en protestas contra el régimen en las ciudades británicas.
Otras informaciones muestran que el régimen de Bahrein ha lanzado una campaña para presionar a los estudiantes que residen en el Reino Unido y que buscan traer la libertad y la democracia a su país.
El Ministerio de Educación de Bahrein ha cortado sus becas de apoyo a los estudiantes que participaron en manifestaciones a favor de la democracia convocadas en Londres. El Ministerio también ha contactado con sus familias en Bahrein pidiendo su inmediato regreso.
Los estudiantes de Bahrein afirman que tres chicas que estudiaban en Manchester y habían vuelto a Bahrein debido a estas amenazas fueron arrestadas por las fuerzas de seguridad a su llegada y han desaparecido.
Desde que las protestas dieron inicio el pasado 14 de febrero, varias decenas de manifestantes han muerto y otros centenares más han sido arrestados. Miles de opositores han resultado igualmente heridos.
El levantamiento sufrió una escalada dramática el 14 de Marzo, cuando el Consejo de Cooperación del Golfo (Pérsico), el CCG, intervino y miles de soldados saudíes llegaron para ayudar a reprimir las protestas.