La periodista ucraniana Anhar Kochneva, secuestrada en octubre por mercenarios sirios y que logró escapar de su cautiverio el mes pasado, regresó la víspera a Siria, destaca hoy la prensa nacional siria

La periodista ucraniana Anhar Kochneva, secuestrada en octubre por mercenarios sirios y que logró escapar de su cautiverio el mes pasado, regresó la víspera a Siria, destaca hoy la prensa nacional siria.

Kochneva aclaró que alquilará un apartamento en Damasco, y que estará "bajo protección permanente, por si los insurgentes deciden repetir el secuestro o vengarse", explicó.

De igual forma, añadió que aunque posee pasaporte ucraniano, no descarta la posibilidad de aceptar la nacionalidad siria si las autoridades se la proponen, destaca la agencia de noticias SANA.

Esta es mi posición y no la cambiaré a causa de un grupo de bandidos, declaró la reportera.

Agregó que continuará su labor en el ámbito de turismo en Siria y prometió ayudar a los periodistas extranjeros que aquí trabajan.

La periodista, de padre ucraniano y madre palestina, residía en Siria desde el inicio del conflicto en 2011, elaborando reportajes y acompañando a medios de comunicación rusos.

Colaboró con diversas cadenas de televisión rusas, en particular, NTV, REN TV y Russia Today pero en el momento del secuestro, en octubre de 2012, no formaba parte de ningún equipo.

Los armados pidieron 50 millones de dólares tras su captura, sin embargo logró escapar a inicios de marzo último.

En conferencia de prensa en Kiev días después de recobrar su libertad, Kochneva afirmó que los secuestradores la maltrataron y amenazaron con asesinarla si el gobierno ucraniano rehusaba pagar el rescate solicitado.

Ella añadió que los secuestros realizados por las bandas terroristas en Siria son generalizados en algunas zonas y que los responsables de estas operaciones son miembros del llamado “Ejército Sirio Libre”, que cobran rescate a cambio de la liberación de los secuestrados, y con el dinero compran armas y suministros militares.

Ella también ha denunciado que Al Yazira y la mayoría de canales occidentales mienten en todo lo que difunden sobre los acontecimientos en Siria, y sólo cubren lo que concuerda con la política de algunos países implicados en los sucesos que vive el país.