Brasil reiteró su postura que llama a resolver la crisis en Siria a través del diálogo y rechaza cualquier intervención militar extranjera en sus asuntos internos y la entrega de armas a los grupos militantes sirios...
Brasil reiteró su postura que llama a resolver la crisis en Siria a través del diálogo y rechaza cualquier intervención militar extranjera en sus asuntos internos y la entrega de armas a los grupos militantes sirios y extranjeros.
El secretario general adjunto de Asuntos Políticos para Oriente Medio y África en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Paulo Cordeiro de Nidara Pinto, afirmó durante su reunión con el Hassan Obeid, Cónsul General de Siria en Brasil, que la Declaración de Ginebra es una de las premisas básicas para la resolución de la crisis en Siria y añadió: “La posición de Brasil es consistente con las posiciones de los países del grupo BRICS”, refiriéndose en este respecto a lo acordado por la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, con sus homólogos de Rusia, India, China y Sudáfrica en el sentido de que la solución en Siria se puede lograr únicamente mediante el diálogo político.
Pinto hizo hincapié en el rechazo de su país a la entrega de armas a los grupos terroristas que operan en Siria y utilizan la violencia para imponer su agenda y las de sus patrocinadores.
El funcionario brasileño saludó los esfuerzos realizados por el gobierno sirio para continuar el diálogo con la parte brasileña con vistas a solucionar algunos obstáculos que enfrenta la misión diplomática de Brasil en Damasco, afirmando que la Embajada de Brasil en esa ciudad mantiene sus contactos con los miembros de la comunidad brasileña en Siria. Además, elogió la atención prestada por las autoridades sirias a todos los miembros de la comunidad y sus familiares.
Las dos partes examinaron también la manera de estrechar aún más las relaciones bilaterales e incrementar los vínculos comerciales y culturales.
Cabe señalar que la comunidad siria en Brasil se mantiene firme en la defensa de su patria y ha condenado la guerra de agresión que sufre a manos de mercenarios y terroristas patrocinados por un grupo de países extranjeros.
