El ministro de Defensa belga, Pieter de Crem, realizó el lunes un llamamiento para trabajar con el fin de hacer frente al fenómeno de la partida de los jóvenes yihadistas que van a luchar a Siria.
El ministro de Defensa belga, Pieter de Crem, realizó el lunes un llamamiento para trabajar con el fin de hacer frente al fenómeno de la partida de los jóvenes yihadistas que van a luchar a Siria.
La agencia italiana de noticias Aki informó que De Crem dijo en sus declaraciones que “Ha llegado el momento de aunar esfuerzos por parte de todos los espectros de la sociedad para hacer frente a este fenómeno”, subrayando la responsabilidad de las familias y de las escuelas en la lucha contra este fenómeno de radicalización de los jóvenes.
Igualmente, De Crem expresó su reserva hacia las sugerencias de algunos ministros concernientes a la necesidad de promulgar nuevas leyes para enfrentar el fenómeno de la partida de jóvenes belgas para luchar en Siria, haciendo hincapié en la conveniencia de aplicar las leyes vigentes, que permiten tomar medidas disuasorias en estos supuestos, en lugar de elaborar nuevas normas.
Poco antes, el ministro de Asuntos Exteriores de Bélgica, Didier Raiendres, había instado a su país a tomar medidas para que los ciudadanos belgas no puedan participar en operaciones de combate en otros países, pidiendo la aplicación de sanciones penales al respecto.
El canciller belga exhortó a los partidos políticos a colocar una barrera ante el crecimiento del radicalismo y el extremismo en el país, motivado en especial por las actividades de grupos de tendencia salafista y wahabí.
En un comunicado difundido por los medios de comunicación de su país, Raiendres dijo que respalda la emisión de un decreto real para imputar penalmente a los ciudadanos belgas que deseen viajar con el propósito de combatir en otros países, señalando que esta imputación sería un factor que les disuadiría para que no emprendan acciones de este tipo,. También dijo que era importante la coparticipación de los ministerios del Interior y de Justicia en este tema.
Esta iniciativa surge a la luz de los informes que confirman el aumento del número de jóvenes belgas, algunos menores de edad, que se han dirigido a Siria en los últimos meses para participar en los combates junto con los grupos armados terroristas que están causando hecatombe y saqueos en Siria. Un reciente informe británico afirma que unos 80 jóvenes belgas estarían luchando en Siria en la actualidad.
El diputado del Parlamento, Denis Ducarme, ha denunciado, en este sentido, el hecho de que Bélgica se ha convertido en un centro de reclutamiento de jóvenes para enviarlos a Siria como mercenarios para luchar junto con grupos armados que intentan derribar el gobierno del presidente Bashar al Assad. Él ha denunciado también que este tipo de reclutamiento tiene lugar asimismo en Francia y Alemania.
En este contexto, la ministra del Interior belga, Joel Malkih, ha sido duramente criticada por la ineficacia de su ministerio y de los servicios de seguridad y las fuerzas especiales para resolver el problema.
Por su parte, el alcalde de Amberes, Bart de Wever, ha invitado a otros alcaldes a abortar el tema de la radicalización de algunos jóvenes y a diseñar respuestas concretas al tema de los que parten a combatir a Siria.
Denuncia islámica
Por otro lado, y por primera vez en Bélgica, una organización religiosa musulmana ha denunciado la instrumentalización del Islam por parte de los reclutadores de voluntarios para luchar en Siria. El teólogo musulmán Mohamed Ramusi señaló a este respecto: “El Islam parece tener una ancha espalda para que lo utilicen con el fin de manipular a los individuos”. Él añadió que “aparte del caso de agresión directa y física realizada contra el territorio en el que vive, no está permitido para el musulmán el ir a luchar a otra parte”, indicó.
“La historia contemporánea nos ha mostrado hasta la saciedad que aquéllos que se han beneficiado de un entrenamiento militar y una formación en el manejo de las armas, o peor aún, aquéllos que han quitado la vida a otras personas, están más inclinados a provocar dramas sociales violentos,” indicó.
Mohamed Ramousi pidió a los musulmanes de Bélgica que denuncien firmemente la partida de jóvenes musulmanes belgas a luchar a Siria Siria.
Fouad Fenyekhlef, miembro de la Organización de Musulmanes Progresistas, realizó hace varias semanas un llamamiento, dirigido en primer lugar a las mezquitas, pidiéndoles que adopten una postura clara en este tema. “Hay grupúsculos minoritarios que animan a los musulmanes a partir. En este sentido, la ausencia de una reacción oficial de las autoridades religiosas musulmanas es peligrosa,” señaló.
En numerosas ocasiones, Siria ha denunciado en los organismos internacionales, como la ONU, la presencia en su territorio de decenas de miles de mercenarios de diversas nacionalidades.
