El gobierno sirio no se niega a recibir a una misión de la ONU encargada de investigar la presunta utilización de armas químicas...
El gobierno sirio no se niega a recibir a una misión de la ONU encargada de investigar la presunta utilización de armas químicas, pero ha pedido que todos los elementos concernientes a esa investigación sean puestos a su disposición, declaró el martes a los periodistas el embajador de Siria en la ONU, Bashar Yaafari.
“El gobierno sirio no ha cerrado sus puertas a la misión de investigación,” afirmó el diplomático. Sin embargo, él estimó que las autoridades de Damasco y el Consejo de Seguridad deben recibir toda la información concerniente al uso de armas químicas en Siria.
“Sean cuales sean los elementos de que dispone el secretario general, debe compartirlos con nosotros así como con el Consejo de Seguridad,” dijo Yaafari.
El comparó la situación a las afirmaciones falsas lanzadas contra Iraq antes de la invasión estadounidense y británica en 2003.
Al ser preguntado si la oposición armada podía obtener armas químicas, el diplomático dijo que ella podía recibirlas del extranjero.
Él recordó que el 8 de diciembre de 2012, Damasco dirigió al secretario general de la ONU y al Consejo de Seguridad una carta que citaba a un diario turco, Yurt, que dijo que Al Qaida tenía una fábrica de producción de armas químicas montada en Turquía. “Nosotros no recibimos ninguna respuesta del Consejo de Seguridad a esta publicación”.
Los militantes utilizaron un polvo blanco contra los habitantes de Saraqeb
Por otro lado, el periódico sirio Baas ha señalado que los terroristas han reunido a los habitantes de Sarakeb en la provincia de Idleb, cerca de las puertas del sur de la ciudad y les han rociado con un polvo de origen desconocido, que venía en sacos y que causó entre ellos una asfixia, temblores y problemas respiratorios. Algunas de estas personas fueron llevadas al territorio de Turquía, donde fueron hospitalizadas, con el fin de acusar a las tropas gubernamentales de haber utilizado armas químicas.