Rusia ha bloqueado una “declaración de alarma” por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por la situación en la estratégica ciudad siria de Al Qussair, que sido tomada en su mayor parte por el Ejército sirio.

Rusia ha bloqueado una “declaración de alarma” por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas por la situación en la estratégica ciudad siria de Al Qussair, que sido tomada en su mayor parte por el Ejército sirio.

La resolución, que fue presentada por Gran Bretaña, expresaba “una grave preocupación por la situación en Al Qussair” y criticaba la ofensiva de las fuerzas armadas de Siria para liberar a dicha ciudad de la presencia de los terroristas apoyados por el extranjero.

Fuentes occidentales señalaron que Rusia rechazó la resolución porque la ONU no había planteado una declaración semejante cuando Al Qussair estuvo en poder de los grupos armados sirios y extranjeros. En ese sentido, indicó que el no haberse manifestado anteriormente privaba a la ONU del derecho a hacerlo en este momento.

El canciller ruso, Sergei Lavrov, consideró además que la declaración del Consejo de Seguridad era un intento de complicar la convocatoria de la conferencia sobre Siria impulsada por su país y EEUU.

El documento también condenaba la presencia de combatientes extranjeros en Al Qussair, pero sólo los que luchan a favor del gobierno, en una referencia implícita a Hezbolá, mientras no hacía referencia a los miles de terroristas extranjeros que han llegado a Siria en general y Al Qussair en particular para luchar contra el gobierno.

Al Qussair, ubicada en la frontera con Líbano, se considera una zona estratégica, dado que los grupos insurgentes la utilizaban como un puente para recibir armas -procedentes de Qatar y Arabia Saudí- y combatientes desde el territorio libanés.

Tales declaraciones necesitan un apoyo unánime del Consejo de Seguridad para entrar en efecto.