Los sindicatos en Turquía se han unido a los manifestantes que están pidiendo la dimisión del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan.

Los sindicatos en Turquía se han unido a los manifestantes que están pidiendo la dimisión del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan.

El martes dos grandes sindicatos turcos iniciaron una huelga general de dos días.

La huelga, que implica a 600.000 miembros de los sindicatos, ha sido considerada una muestra de notable apoyo público a los manifestantes, que continúan su lucha pese a la represión policial. La huelga ha afectado, sobre todo, al sector público y muchos departamentos públicos continúan cerrados.

El miércoles, los sindicatos comenzaron también una marcha desde la Plaza Sisli de Estambul hacia la Plaza de Taksim, en el quinto día de un movimiento de protesta contra el gobierno que agita el conjunto de Turquía.

Cuatro manifestantes han sido muertos desde el inicio de las manifestaciones el viernes pasado. Unos 2.000 han resultado heridos y un número similar han sido detenidos.

Los manifestantes en la Plaza de Taksim comenzaron a lanzar eslóganes contra Erdogan, a pesar del llamamiento para que se detengan las protestas, que fue lanzado a mitad de la jornada por el viceprimer ministro, Bülent Arinç.

Arinç pidió el martes disculpas por los numerosos heridos causados por la violencia policial contra los manifestantes desde el inicio de las protestas. Los manifestantes han rechazado tales disculpas y han prometido seguir adelante con sus acciones.

Desde el viernes, decenas de miles de manifestaciones anti-gubernamentales han sido realizadas en Estambul, Ankara, Izmir, Mugla, Antalya y otras muchas ciudades.