Hezbolá ha dado la espalda a la polémica suscitada por su participación en los combates en Siria, especialmente en Qussair, ignorando las críticas virulentas y acusaciones provocadas por su implicación en ese conflicto.

Hezbolá ha dado la espalda a la polémica suscitada por su participación en los combates en Siria, especialmente en Qussair, ignorando las críticas virulentas y las acusaciones provocadas por su implicación en ese conflicto y las alegaciones sobre las posibles repercusiones negativas en las relaciones entre sunníes y shiíes en el Líbano.

Hezbolá ha delegado en Nabih Berri la gestión de la batalla sobre la prolongación del mandato del Parlamento, de la cual él era el más ferviente partidariio, tras haber trazado los límites de las negociaciones con el nuevo primer ministro Tammam Salam en el tema de la composición del nuevo gobierno.

El partido ha dejado ver también que su batalla se desarrolla en Siria y no en el suelo libanés. Para Hezbolá, la toma de Al Qussair y el reforzamiento del control del gobierno sirio sobre la frontera sirio-libanesa revisten una doble importancia.

El objetivo de la batalla de Al Qussair era el cortar los pasos fronterizos que implicaban al Líbano en la guerra de Siria mediante el tráfico de armas y la creación de un santuario para los militantes que luchan en ese país.

La liberación de Al Qussair forma parte de un plan cuya ejecución será completada en Alepo. La importancia de la batalla de Al Qussair reside en los cálculos políticos, militares y de seguridad de Hezbolá, que considera que se trata de la primera ofensiva de envergadura del movimiento fuera de sus zonas de influencia desde su creación. Hasta ahora, el movimiento se había enfrascado sólo en batallas defensivas contra Israel.

Por consiguiente, el mando militar de Hezbolá estima que la participación del movimiento en los combates en Al Qussair constituye un nuevo ejercicio importante desde los últimos enfrentamientos militares con Israel, que se remontan a la guerra de Julio de 2006.

Esto deja ver que, con el objetivo de proteger a la Resistencia, Hezbolá se dispone a implicarse más en la guerra en Siria, ya sea en Al Qussair, Zabadani, Homs o Alepo.

Al Ajbar