La actual crisis en EEUU ha llevado a la reducción del presupuesto militar estadounidense hasta los 487.000 millones y en ese contexto EEUU muestra preocupación por el potencial militar chino.
Desde la Segunda Guerra Mundial, el presupuesto militar estadounidense no se había visto afectado por las crisis económicas. EEUU es el único país del mundo que ha gastado más de 600.000 millones de dólares anuales en su presupuesto de defensa, lo que equivale al 40% del gasto mundial en este capítulo. Sin embargo, la actual crisis en EEUU ha llevado a la reducción del presupuesto militar estadounidense hasta los 487.000 millones.
En la actualidad, los medios militares estadounidenses insisten en hablar de “actos de provocación de parte de China y Corea del Norte”. El último informe del Departamento de Defensa de EEUU para este año critica los esfuerzos de China para incrementar su potencial militar en su territorio y las áreas marítimas adyacentes. Esto es considerado por EEUU como una “provocación”.
El documento estadounidense acusa a China de intentar cambiar el estatus quo regional por la fuerza “sobre la base de reclamaciones territoriales que no respetan, de hecho, el Derecho Internacional”, según EEUU.
El documento expresa la inquietud de EEUU con respecto a lo que califica de “rearme masivo de China”, lo que incluiría la botadura del portaaviones Liaoning y la producción del caza J-15, diseñado para los portaaviones. También incluye aquí la producción de la segunda generación del caza J-20 indetectable al radar.
El documento estima que China carece de transparencia en lo que concierne a sus capacidades militares reales y afirma que el último informe de defensa chino no incluye las cifras de su presupuesto militar.
El documento estadounidense declara asimismo que para responder a los desafíos militares de China los medios diplomáticos no bastan y aboga por permitir a países como Japón desarrollar su capacidad militar y aumentar sus gastos en defensa para poder instaurar un nuevo equilibrio de disuasión frente a China y Corea del Norte.
EEUU ha llevado a cabo maniobras conjuntas con Japón en estos últimos años. Del mismo modo, ha intensificado sus actividades de espionaje contra China.
El documento estima que es difícil para EEUU aprobar contramedidas contra las capacidades reforzadas de China en el Mar de la China Meridional, donde Pekín ha desplegado armas de mediano y largo alcance, en un momento en el que el presupuesto de defensa estadounidense se ha visto reducido en casi 100.000 millones de dólares por año debido a la crisis económica norteamericana.
Paralelamente, el presupuesto de defensa de China no deja de aumentar y se ha multiplicado por cuatro desde la pasada década. En este sentido, el documento estadounidense señala que la aproximación entre el presupuesto de defensa chino y el de EEUU podría llevar a una situación “extremadamente peligrosa”.