Hezbolá ha condenado con virulencia la campaña de destrucción de mezquitas y lugares santos llevada a cabo por las autoridades de Bahrein.
Hezbolá ha condenado con virulencia la campaña de destrucción de mezquitas y lugares santos llevada a cabo por las autoridades de Bahrein. Un último balance habla de 25 mezquitas destruidas y de 253 dañadas. Las imágenes muestran igualmente ejemplares del Sagrado Corán quemados.
“Las prácticas de las autoridades de Bahrein ha sobrepasado todos los límites y viola las leyes divinas y humanas más sagradas y fundamentales. Esto coloca a las autoridades de Bahrein en una situación de completa violación de los derechos humanos,” señala el comunicado de Hezbolá.
Condenando lo que considera como prácticas represivas, el Partido de la Resistencia de Líbano pide a “los ulemas y las organizaciones pro-derechos humanos que protejan el derecho de todo ciudadano a ejercer sus deberes religiosos, tomen medidas adecuadas en contra de la destrucción de los lugares de culto y la profanación del Sagrado Corán y actúen para poner fin a esta campaña contra las mezquitas, el Libro Sagrado y los oprimidos”.
Llamamiento a los hombres libres a que protesten contra la destrucción de mezquitas
Por otro lado, la oposición bahreiní en el extranjero ha pedido a los bahreiníes, la nación árabe e islámica y todos los hombres libres del mundo que participen este viernes 22 de abril de 2011 en una sentada titulada “Nuestras Mezquitas son Nuestras Almas” para condenar la demolición de mezquitas y lugares santos en Bahrein.
La oposición ha pedido a los imames de las mezquitas, los ulemas y la Organización de la Conferencia Islámica que denuncien las agresiones contra las mezquitas y los santuarios religiosos en Bahrein.
“El ejército de Bahrein, con el apoyo de los ejércitos saudí y de los EAU, ha destruido y dañado decenas de mezquitas, algunas de las cuales databan de más de 100 años,” dijo la oposición de Bahrein en un comunicado.
“La quema de los ejemplares del Sagrado Corán, la demolición de mezquitas y la actuación dirigida a impedir a los fieles que lleven a cabo sus oraciones revela el profundo rencor de las autoridades de Bahrein y sus aliados,” añadió la oposición, que subrayó que “dichas prácticas se asemejan a las llevadas a cabo por los enemigos de Islam en la Palestina ocupada y en EEUU”.