El secretario general de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasralá, pronunció un discurso durante la cena anual de Iftar de la Organización de Apoyo a la Resistencia Islámica el viernes.
El secretario general de Hezbollah, Sayyed Hassan Nasralá, pronunció un discurso durante la cena anual de Iftar de la “Organización de Apoyo a la Resistencia Islámica” el viernes, en el que reiteró la importancia del diálogo nacional con el fin de acordar una estrategia de defensa para el Líbano, y destacó la importancia de la preservación del Ejército libanés.
Sayyed Nasralá se refirió al importante papel de la Resistencia Islámica en los últimos años, sobre todo después de la agresión de Abril de 1996 y los años posteriores, y en el logro de acuerdos internos que protegieron a los ciudadanos e impusieron un equilibrio con el enemigo israelí.
Su Eminencia subrayó que estos logros de la Resistencia Islámica fueron el resultado de su visión correcta y sus claros objetivos, deberes y trayectoria, así como su fe, determinación y voluntad.
“Permítanme asegurarles que esta Resistencia se guía por la razón, y las victorias logradas son una prueba de su eficacia”, indicó. “Nadie puede dar garantías al Líbano que protejan al país de las amenazas israelíes. Lo que protege a este país es la autosuficiencia y la obtención de medios militares que disuadan al enemigo”.
Sayyed Nasralá subrayó además que la Resistencia extrae su fuerza del pueblo, que no ve a Hezbolá como un partido o una organización, sino como una determinación popular por la que ellos están dispuestos a sacrificar a sus seres queridos.
Cualquiera que intente eliminar a la Resistencia fracasará
Sayyed Nasrallah se preguntó si alguien cree que el Líbano ya no está expuesto a las amenazas de Israel, haciendo hincapié en que si alguien realmente piensa eso sería un grave error, ya que la codicia de Israel no tiene fin.
Su Eminencia aseguró que todo aquel que ha tratado de romper o aislar a la Resistencia ha fracasado ya que la Resistencia no es una organización o un partido, sino una determinación pública, que está lista para cualquier sacrificio.
“El noble pueblo de este país han entregado a la Resistencia a sus seres más queridos, a sus hijos y su sangre. Por lo tanto, esta Resistencia no es una facción que se pueda asediar o aislar”, señaló.
El enemigo más pendiente de Galilea que de Beirut
El secretario general de Hezbolá señaló que la Resistencia es capaz de superar todas las dificultades y que el enemigo está revisando todos sus planes y cálculos después de lo que ha ocurrido en los dos pasados meses.
Él indicó que “en cualquier guerra futura, la atención del enemigo estará puesta más en Galilea que en Beirut. De ahora en adelante, nadie puede atacar al Líbano sin pagar un precio”.
Sayyed Nasralá consideró que los ataques contra la Resistencia son el resultado de sus victorias contra la entidad sionista.
“La Resistencia, que triunfó en 1982, 2000 y 2006, ha sido capaz de hacer abortar el proyecto del “Nuevo Oriente Medio”. De este modo, era normal que fuera atacada. Además de la confrontación militar con el enemigo, estamos siendo atacados en los niveles militar, de seguridad, cultural y social”, dijo, añadiendo que “si la Resistencia no fuera atacada, esto significaría que es ineficaz y que el enemigo no la teme”.
Existe la necesidad de una estrategia de defensa nacional
Sayyed Nasralá reiteró que Hezbolá estaba preparado para el diálogo bajo cualquier forma para crear una estrategia de defensa nacional.
“Nosotros propusimos varios proyectos sobre una estrategia de defensa nacional, pero el otro lado no ha mostrado interés en debatir de forma seria este tema. Todo lo que quieren que Hezbolá entregue sus armas. “Dadnos vuestras armas y que Dios os dé bienestar, dicen”, señaló Su Eminencia.
Un llamamiento para preservar el Ejército
En el plano interno, Su Eminencia subrayó la importancia de mantenerse cautelosos, especialmente en medio de los últimos acontecimientos políticos y de seguridad y de la intensa división política.
Sayyed Nasrallah aseguró que “si el Ejército fuera destruido o quedara dividido, no sólo no habría paz y estabilidad en el país sino que ni siquiera habría ya un estado o un país. Por lo tanto, nuestro llamamiento hoy es el de mantener la neutralidad de esta institución. También hacemos un llamamiento para su fortalecimiento y refuerzo”.
“Debemos preservar el Ejército y no fracturarlo. Éste es uno de los deberes nacionales más importantes en este momento”, agregó, recordando que “en 1993, el Ejército atacó a los ciudadanos en las calles, matando e hiriendo a muchos de ellos. Sin embargo, ni la población ni Hezbolá apuntaron sus armas al Ejército”.
Dirigiéndose a los medios de comunicación, Sayyed Nasrallah dijo: “Pongamos un límite a las “historias urgentes” de los medios de comunicación sobre el hallazgo de explisivos en éste y aquel lugar, porque la mayoría de ellas son falsas y son sólo parte de una guerra psicológica”.
Los intentos de exclusión han fracasado
El secretario general de Hezbolá aseguró que todos los intentos de exclusión y el aislamiento de la Resistencia no han llevado a ningún lugar.
“Debemos negociar y encontrar vías de salida. No importa cuanta enemistad existiera, debemos de aprender a convivir los unos con los otros”, señaló. “En este Mes Sagrado y a pesar de todas las disputas y acusaciones políticas, yo digo que nuestra mano está extendida y que estamos preparados para el diálogo”.
“Esto no significa que si celebramos un diálogo las cosas vayan a ser fáciles, pero al menos estaremos en una mejor situación”, señaló.