Millares de partidarios del gobierno dirigido por los islamistas y opositores al mismo han protagonizado sendas manifestaciones en la noche del martes al miércoles en Túnez.

Millares de partidarios del gobierno dirigido por los islamistas y opositores al mismo han protagonizado sendas manifestaciones en la noche del martes al miércoles en Túnez en un momento en el que el país atraviesa una profunda crisis política.

Los manifestantes favorables al partido islamista An Nahda se reunieron en gran número en el suburbio de Bardo, en la capital tunecina, frente al edificio del Parlamento. Un poco más lejos, una manifestación rival organizada por la oposición buscó denunciar el “terrorismo” y reclamó la disolución de la Asamblea y la dimisión del gobierno, según un periodista de AFP.

Previamente, los participantes en esta última manifestación se reunieron frente a la sede del gobierno para encender velas en memoria de los ocho soldados muertos en una emboscada el lunes en la frontera argelina y atribuida a un grupo terrorista.

Cada noche desde el asesinato del opositor Mohammed Brahimi, el pasado jueves, que fue atribuido a elementos salafistas, la oposición y los partidarios del gobierno organizan manifestaciones rivales. Algunas de ellas han acabado con enfrentamientos entre ambos grupos.

El primer ministro, Ali Larayedh, ha señalado que, a pesar de la multiplicación de los llamamientos a favor de la dimisión de su gobierno, éste último continuará sus funciones.