El presidente boliviano, Evo Morales, clausurará hoy la Cumbre Antiimperialista que sesionó durante los dos últimos días en el Hotel Cochabamba, de esta urbe del centro del país.

El presidente boliviano, Evo Morales, clausurará hoy la Cumbre Antiimperialista que sesionó durante los dos últimos días en el Hotel Cochabamba, de esta urbe del centro del país.

Morales será el orador principal del acto de masas que pondrá fin a la reunión, convocada por el llamado Pacto Social boliviano, la unión de cinco organizaciones sociales del país, para condenar, en primera instancia, el bloqueo aéreo que sufrió el mandatario en Europa a comienzos del mes anterior.

Los más de mil 200 delegados participantes y miles de cochabambinos se darán cita en la avenida Blanco Galindo para mostrar su respaldo a las determinaciones del cónclave y escuchar al jefe de Estado.

La parte plenaria de la reunión terminó la víspera con la aprobación de más de un centenar de resoluciones por los miembros de seis mesas de trabajo, las cuales pasarán a formar parte de la resolución final de la Cumbre.

La suma de las determinaciones aprobadas por las referidas comisiones se resumirán en un documento final que será presentado por los delegados de los movimientos y organizaciones sociales presentes en la Cumbre, según adelantó el representante de la Coordinadora Nacional para el Cambio (Conalcam), el dirigente campesino Rodolfo Machaca.

Explicó que con la sistematización de esas resoluciones, el documento final tendrá de 10 a 15 puntos específicos sobre temas puntuales como el respaldo de la demanda marítima boliviana, la salida de las bases militares de Colombia o la devolución de las Islas Malvinas a Argentina, entre otros.

Para Machaca, el desafío a encarar será el comienzo de reflexiones y análisis de intelectuales, sociólogos y analistas políticos de todos esos temas, además de que las organizaciones sociales logren que cada resolución sea aplicada de manera vinculante por sus gobiernos.

Machaca cree, también, que la Cumbre es una oportunidad para demostrarles a los gobiernos del mundo que llegó el momento de los movimientos sociales, la razón por la cual deben priorizar la línea, la visión y los objetivos de trabajo de las referidas organizaciones. El encuentro de los delegados a la reunión con el presidente Evo Morales constituirá uno de los momentos más importantes de las tres jornadas destinadas al cónclave porque el nombre del mandatario estuvo presente de manera constante en cada uno de los debates.

En varias oportunidades, los más de 1.200 delegados asistentes corearon el nombre del primer jefe de Estado Indígena de Bolivia, y manifestaron su rechazo al bloqueo aéreo que sufrió en Europa a comienzos del mes anterior.

El centenar de organizaciones sociales, de 18 países, reunidas en el Hotel Cochabamba, condenaron la posición de España, Francia, Portugal e Italia de impedir el sobrevuelo y operaciones del avión presidencial boliviano por sus respectivos territorios.

Delegados de esas naciones pidieron perdón a Bolivia y a Morales en nombre de sus países, entre ellos el francés Yago Ortiz, quien insistió que Francia no es el gobierno, sino el pueblo.