Millones de personas de todo el mundo han llevado a cabo manifestaciones para conmemorar el Día Internacional de Al Quds y mostrar su apoyo a la resistencia palestina contra Israel.
Millones de personas de todo el mundo han llevado a cabo manifestaciones para conmemorar el Día Internacional de Al Quds y mostrar su apoyo a la resistencia palestina contra Israel.
Millones de personas en diferentes países realizaron manifestaciones masivas el viernes en solidaridad con el pueblo palestino oprimido, expresando su indignación por las políticas del régimen israelí y sus aliados y pidiendo la liberación de Palestina.
El Día de Al Quds se celebra cada año en el último viernes del mes de ayuno musulmán de Ramadán, durante el cual los manifestantes exigen la liberación de Palestina y el fin de la ocupación israelí.
Musulmanes en más de 80 países, entre ellos Irán, Pakistán, Afganistán, Australia e Indonesia, asistieron a las manifestaciones del Día de Al Quds para apoyar a los palestinos y condenar la ocupación israelí.
En agosto de 1979, el fallecido fundador de la República Islámica, el Gran Ayatolá Ruholá Jomeini, declaró el último viernes del mes musulmán del ayuno como el Día Internacional de Al Quds, una jornada de solidaridad mundial con Palestina.
Los palestinos están tratando de crear un estado independiente en los territorios de Jerusalén Este, Cisjordania y la Franja de Gaza, y exigen que Israel se retire de los territorios palestinos ocupados en la guerra en 1967.
El Día de Al Quds de este año tuvo lugar en un momento en que se han anunciado conversaciones auspiciadas por EEUU entre el régimen sionista y la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Las dos partes sostuvieron conversaciones en Washington a principios de esta semana y afirmaron que éstas que se reanudarán a mediados de agosto.
Sin embargo, muchos palestinos creen que las conversaciones están condenadas al fracaso porque el régimen israelí y Washington quieren empujar a los palestinos a una rendición incondicional.
Las últimas conversaciones se rompieron en septiembre de 2010 después de que Tel Aviv se negara a congelar las actividades en los asentamientos de la Cisjordania y el Jerusalén Este ocupados.
La presencia y continua expansión de los ilegales asentamientos israelíes en la Palestina ocupada ha creado un obstáculo insalvable para tales negociaciones.
