El presidente sirio, Bashar al-Assad, dijo el domingo que su país necesita un diálogo transparente entre los sirios.
El presidente sirio, Bashar al-Assad, dijo el domingo que su país necesita un diálogo transparente entre los sirios, subrayando que nadie más que el pueblo sirio será capaz de encontrar una solución a la crisis que ha durado 28 meses.
Assad hizo estas declaraciones durante un banquete de iftar organizado en Damasco, la capital siria, al que asistieron muchos grupos sociales, líderes religiosos musulmanes y cristianos y ministros clave del gobierno.
Haciendo hincapié en la necesidad de organizar un diálogo para resolver la crisis, el dirigente político dijo que el terrorismo actual en Siria no puede ser resuelto por medios políticos.
“Ninguna persona razonable puede imaginar que se puede luchar contra el terrorismo a través de medios políticos”, dijo.
Y enfatizó: “Ninguna solución se puede encontrar al terrorismo más que la represión con una mano de hierro.”
En su discurso, que duró 45 minutos, el presidente instó a las fuerzas armadas a seguir luchando contra los milicianos del ESL y las organizaciones takfiris.
“El tema del terrorismo se resolverá en el campo de batalla”, indicó.
Sintiéndose fuerte tras dos importantes éxitos militares, Assad dirigió un mensaje el jueves a las tropas con motivo del Día del Ejército. “Si en Siria no estuviéramos seguros de la victoria, no habríamos tenido la capacidad de resistir y no habríamos sido capaces de continuar (la batalla) desde más de dos años”, subrayó.
Assad también acusó a los grupos de la oposición siria en el exilio de no querer una solución política.
“La oposición en el extranjero ni siquiera se representa a sí misma sino a los países que la apoyan”, dijo Assad, y agregó que su gobierno se ha comprometido a participar en la conferencia internacional sobre la paz en Siria de Ginebra-2, a pesar de la falta de un verdadero representante de la oposición siria.
“Si queremos salir de la crisis, no debe haber excepciones a los medios que nos puedan ayudar”, señaló.
Assad describió la actual situación en Siria como un enfrentamiento entre el país y unos grupos que están fuera de la ley.
“Se ha hecho todo lo posible. No podemos hacer nada más que defendernos con nuestras propias manos”, dijo, describiendo a los rebeldes armados como “monstruos”.
Rindiendo homenaje al ejército sirio, el presidente dijo que los logros alcanzados por sus tropas en los últimos dos años habían sido “increíbles”.
Él también hizo un raro desplazamiento fuera de Damasco a un antiguo bastión rebelde donde las imágenes de televisión le mostraron saludando a varios soldados.