Los Hermanos Musulmanes de Egipto han afirmado que 2.200 personas han muerto y otras 10.000 han resultado heridas en los ataques llevados a cabo por las fuerzas de seguridad egipcias...
Los Hermanos Musulmanes de Egipto han afirmado que 2.200 personas han muerto y otras 10.000 han resultado heridas en los ataques llevados a cabo por las fuerzas de seguridad egipcias para disolver los dos campamentos de protesta levantados por los partidarios del presidente Mohammed Mursi en El Cairo.
Los HHMM afirmaron que esta cifra fue proporcionada por el Hospital de Rabaa el miércoles. Por su parte, las cifras oficiales hablan de 59 muertos.
Por otro lado, el ministro del Interior de Egipto afirmó que 4 soldados habían muerto en los choques entre manifestantes y fuerzas de seguridad.
La televisión estatal egipcia anunció que los manifestantes habían sido evacuados de sus campos en Rabaa al Adawiya y la Plaza Nahda.
Los miles de manifestantes de uno de los campos habían colocado una barrera con sacos de arena y ladrillos para sellar el área y los testigos afirmaron que los bulldozers del Ejército habían actuado para desmantelarla.
La policía utilizó gases lacrimógenos, vehículos blindados y bulldozers para dispersar a los seguidores de Mursi y disolver los campamentos, aunque parece que también fue utilizada munición real.
Las autoridades egipcias prohibieron asimismo la circulación de trenes para impedir que los manifestantes salieran de la capital.
Responsables de seguridad afirmaron que unos 200 seguidores de Mursi que fueron capturados en Rabba llevaban armas.
El Ministerio del Interior egipcio también dijo que varios líderes de los Hermanos Musulmanes habían sido arrestados.
Por su parte, los líderes de los HHMM condenaron la “masacre” y pidieron a todos los egipcios que tomaran las calles para protestar contra la creciente violencia.
El 12 de agosto, la llamada Alianza Pro-democracia Anti-golpe pidió a la población que se manifestara en todo el país para denunciar la represión militar contra sus sentadas y concentraciones. La Alianza busca la reinstauración de Mursi como presidente.
En la actualidad, las autoridades militares han tomado medidas para procesar a Mursi, que ha sido llevado a un lugar secreto, por cargos relativos a sus actividades durante la revolución que derrocó a su predecesor Mubarak.
Centenares de manifestantes, en su mayoría seguidores de Mursi, han resultado muertos o heridos durante los episodios de violencia acaecidos tras el derrocamiento del presidente.