Tras la mortal explosión que sacudió el Suburbio del Sur de Beirut el jueves, todos los estados del mundo se han apresurado a expresar su condena y condolencias al gobierno libanés, excepto Arabia Saudí.
Tras la mortal explosión que sacudió el Suburbio del Sur de Beirut el jueves, todos los estados del mundo se han apresurado a expresar su condena y condolencias al gobierno libanés, excepto Arabia Saudí.
El régimen saudí no ha ni condenado ni comentado el atentado, pese al gran número de víctimas, entre muertos y heridos.
Un coche bomba, relleno de 50 kgs de explosivos y conducido por un kamikaze, explotó en la vecindad de Ruweiss. Al menos 22 personas han sido martirizadas y otras 336 han resultado heridas.
El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas extendió sus condolencias a las víctimas y sus familias y expresó simpatía hacia los heridos en este “acto odioso” y sus condolencias al pueblo y el gobierno libanés, dijo una declaración.
“Los miembros del Consejo de Seguridad reafirman que el terrorismo en todas sus formas y manifestaciones constituye una de las más serias amenazas a la paz y seguridad internacional y que cualquier acto de terrorismo es criminal e injustificable, con independencia de su motivación, del lugar y el tiempo que se produzca y de quien quiera que lo cometa”.
El secretario general de la ONU denunció también la explosión y pidió a todos los libaneses que permanezcan unidos frente a tal violencia “inaceptable”.
“Tales actos de violencia son completamente inaceptables y sólo refuerzan la determinación de la comunidad internacional de continuar apoyando la seguridad y estabilidad del Líbano en un tiempo de severas turbulencias regionales”, dijo Ban en una declaración emitida por su portavoz.
“Durante este período de tensiones incrementadas, el secretario general pide a todos los libaneses que permanezcan unidos, se agrupen en torno a las instituciones del estado y actúen para salvaguardar la seguridad y estabilidad en el Líbano”, añadió la declaración.
Por su parte, la embajadora de EEUU en Líbano, Maura Connelly, condenó el atentado y llamó a tos grupos libaneses a permanecer en calma y ejercer la autocontención.
El ministro de Información de Siria, Omran al Zoabi, “condenó con fuerza” la explosión en el Suburbio del Sur y pasó sus condolencias a las familias de las víctimas.
Qatar condenó también el atentado con bomba, según la Agencia Qatarí de Noticias, que citó a un responsable del Ministerio de Exteriores qatarí.