“Al lanzar cohetes hacia el territorio israelí, las fuerzas del yihad internacional han querido alcanzar a Israel y perjudicar al mismo tiempo a Hezbolá en razón de su implicación en la guerra en curso en Siria”.

“Al lanzar cohetes hacia el territorio israelí, las fuerzas del yihad internacional han querido alcanzar a Israel, al que ellas detestan, y perjudicar al mismo tiempo a Hezbolá en razón de su implicación en la guerra en curso en Siria”, afirmó el diario israelí Yediot Aharonot.

“Todos los indicios apuntan a la conclusión de que los cohetes que cayeron al oeste de la Galilea el jueves fueron lanzados por grupos radicales que trabajan para el yihad internacional. Ellos pueden también estar vinculados al grupo Ansar al Islam, una organización fundamentalista sunní, activa en el Norte y el Sur del Líbano”, añade el periódico.

“Este grupo se presenta como un enemigo de Hezbolá. El disparo de cohetes tendría el objetivo de provocar un crecimiento de la tensión en la frontera entre el Líbano e Israel con el fin de hacer correr la sangre de los dos enemigos: Israel y Hezbolá.”

“No es ésta la primera vez que los grupos radicales lanzan agresiones desde el Sur del Líbano con el fin de provocar una guerra entre Israel y Hezbolá. Ellos han perpetrado también ataques contra la UNIFIL y contra los cristianos para crear una situación embarazosa para Hezbolá en sus propias regiones.”

“La localidad desde la que fueron lanzados los cohetes es de mayoría sunní y está situada cerca de un campo palestino. Israel adopta una política que consiste en evitar dejarse arrastrar a una confrontación en Siria y el Líbano. Sólo lanzará un ataque si estima que las líneas rojas han sido cruzadas,” señaló el periódico.