Si Barack Obama decide atacar al régimen sirio, esto significará que EEUU está al lado de Al Qaida.
Si Barack Obama decide atacar al régimen sirio, esto significará que EEUU está al lado de Al Qaida, señaló el conocido periodista británico Robert Fisk en un artículo publicado en el diario The Independent.
“Aquellos que asesinaron a miles de estadounidenses el 11 de Septiembre combatirán al lado de la nación donde ellos asesinaron tan cruelmente a esas personas”, señaló Fisk. Esto será “todo un acontecimiento para Obama, Cameron, Hollande y los otros minijefes de la guerra, aunque no será declarado alto y fuerte por el Pentágono o la Casa Blanca ni, yo supongo, por Al Qaida.”
“Quizás los norteamericanos deberían pedir a Al Qaida que les ayudara con el plan de ataque porque, después de todo, ella está presente sobre el terreno, donde los estadounidenses no tienen ningún interés en ir. Quizás Al Qaida podría ofrecer informaciones a un país que pretende que los hombres más buscados del mundo son, justamente, los partidarios de Al Qaida y no los sirios”.
“Esto da lugar, evidentemente, a situaciones irónicas. Mientras que los estadounidenses atacan a Al Qaida con los drones en Yemen y Pakistán -con, bien entendido, la carga habitual de víctimas civiles- ellos suministran al mismo tiempo a esta organización un apoyo frente a sus enemigos en Siria. Pueden apostar hasta el último dólar que el objetivo de los norteamericanos en Siria no es Al Qaida ni el Frente al Nusra.”
“Y nuestro primer ministro (David Cameron) va a aplaudir todo lo que hacen los norteamericanos. Los atentados de Londres parecen haber desaparecido de su memoria”.
Fisk denuncia también el silencio hacia los ataques químicos de los grupos armados sirios. “Nadie se va a interesar por los rumores persistentes en Beirut sobre el tema de tres miembros de Hezbolá que han sido alcanzados por un ataque con gas. Ellos están en la actualidad tratados en un hospital de Beirut”.
Fisk indica que los norteamericanos no se acuerdan de la última vez que atacaron al Ejército sirio. Esto tuvo lugar en el Líbano el 4 de diciembre de 1983 cuando la aviación estadounidense atacó a baterías de misiles sirios en el Valle de la Bekaa. Un bombardero norteamericano A-6 fue alcanzado por un misil Strela sirio de fabricación rusa. Su piloto Mark Lange murió y su copiloto, Robert Goodman, fue hecho prisionero y encerrado en una prisión en Damasco. Jesse Jackson visitió Siria para obtener su liberación un mes más tarde.
“Se nos dice que esta guerra será de corta duración, algunos días a lo sumo. Es lo que Obama quiere creer. Pero pensad en Irán. Pensad en Hezbolá”, concluye Fisk.