una intervención militar en Siria sin el aval del Consejo de Seguridad de la ONU debería ser considerada como una agresión.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha exigido el miércoles que EEUU y los países occidentales que promueven un ataque contra Siria presenten en la ONU “pruebas convincentes” del uso de armas químicas por el poder en Siria y ha subrayado que, en el caso contrario, una intervención militar en Siria sin el aval del Consejo de Seguridad de la ONU debería ser considerada como una “agresión”.
“Si hay informaciones según las cuales las armas químicas han sido empleadas por el Ejército regular, entonces ellas deben ser presentadas en el Consejo de Seguridad de la ONU y deben ser convincentes”, señaló Putin.
Putin añadió que “incluso en EEUU existen expertos que creen que las evidencias presentadas por la Administración estadounidense no son convincentes y no excluyen la posibilidad de que la oposición siria llevara a cabo actos provocadores para dar a sus patrocinadores un pretexto para una intervención militar”.
Él añadió que “según el Derecho Internacional, sólo el Consejo de Seguridad de la ONU puede decidir el uso de las armas contra un estado soberano. Cualquier otro pretexto o medio que justifique el uso de la fuerza frente a un estado independiente y soberano es inaceptable y no puede ser calificado más que como una “agresión”.
En lo que se refiere al sistema de defensa antiaérea y antimisil S-300, Putin ha explicado que su país “ha suministrado ciertos elementos a Siria, pero su entrega no se ha efectuado todavía. Sin embargo, en el caso de que se produzcan acontecimientos que violen las normas internacionales en vigor vamos a reexaminar la posibilidad de entregar armas tan sensibles a ciertas regiones del mundo”, señaló.