Rusia ha publicado pruebas que muestran que los ataques químicos del pasado 19 de Marzo no pertenecen a la munición estándar del Ejército sirio.

Rusia ha publicado pruebas que muestran que los ataques químicos del pasado 19 de Marzo no pertenecen a la munición estándar del Ejército sirio y que el proyectil que llevaba la sustancia era similar a los fabricados por un grupo rebelde sirio, señaló el Ministerio de Exteriores ruso.

Una declaración publicada por el Ministerio el miércoles denunció “la masiva campaña de información dirigida a responsabilizar a Damasco del supuesto uso de las armas químicas en Guta, incluso aunque los resultados de la investigación de la ONU no han sido revelados”.

“De este modo, se está preparando una acción militar contra Damasco”, señaló el Ministerio.

Sin embargo, las muestras extraídas en el ataque de Jan al Assal del 19 de Marzo y analizadas por expertos rusos indican que el proyectil pertenecía a los rebeldes, señaló la declaración del Ministerio, que añade que el informe de 100 páginas fue entregado por Rusia a la ONU.

Los puntos clave del informe son los siguientes:

- El proyectil empleado en el incidente no pertenece a las municiones estándar del Ejército sirio y se corresponde, por su tipo y sus parámetros, al tipo de misiles fabricados en el norte de Siria por la brigada de Bashair al Nasr.

- El RDX, que es conocido también como hexógeno o ciclonita, fue utilizado como carga explosiva para el proyectil y “no es utilizado en las municiones químicas estándar”.

- Las muestras del suelo y del obús contienen restos de un agente nervioso sintetizado no industrial sarin y diisopropilfluorofosfato, que fue utilizado por los estados occidentales para producir armas químicas durante la Segunda Guerra Mundial.