Los barcos de guerra rusos en el Mediterráneo son capaces de reaccionar a una escalada del conflicto en Siria, indicó el miércoles una fuente militar rusa, mientras que EEUU se prepara para posibles ataques contra Damasco.
Los barcos de guerra rusos en el Mediterráneo son “capaces de reaccionar” a una escalada del conflicto en Siria, indicó el miércoles una fuente militar rusa, mientras que EEUU se prepara para posibles ataques contra Damasco.
“Hoy en día consideramos que nuestra presencia en el Este del Mediterráneo es suficiente para cumplir nuestras misiones. Ellos (los barcos) pueden si es necesario, junto con las fuerzas de submarinos, ejercer una influencia sobre la situación militar desde el momento presente”, declaró una fuente del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas a la agencia Interfax.
“Estamos dispuestos a resolver los problemas que puedan aparecer”.
“Por esto, va a haber pronto cambios en el seno del grupo (de navíos) para responder mejor a la evolución de los acontecimientos”, dijo esta fuente sin precisar.
“El asesino de portaaviones”
El crucero lanzamisiles Moskva, que se encuentra actualmente en el Atlántico, se dirige ahora al Mar Mediterráneo adonde llegará el 17 de septiembre”, indicó una fuente del Estado Mayor de las fuerzas armadas rusas a RIA Novosti.
El Moskva, llamado el “asesino de portaaviones” tenía previsto hacer una escala en Cabo Verde, pero ésta ha sido suspendida. Él es el buque insignia de la Flota del Mar del Norte y está dotado de 16 rampas de lanzamiento de misiles B1000, con un alcance de 700kms. Tres de estos misiles bastan para destruir un barco de guerra.
Dos navíos lanzamisiles de la Flota rusa del Mar Negro, el Ivanovets y el Chtil, llegarán a la costa de Siria el 29 de septiembre, según la misma fuente.
Además, los destructores Smetlivi y Nastoichivi se dirigen también hacia el Mediterráneo, indicó Interfax.
En esta zona se encuentran ya el navío de escolta Neustrachimy y los buques de desembarco Alexander Chabalin y Admiral Nevelski. A éstos van a unirse otros dos navíos de desembarco, le Novotcherkassk y el Minsk, que son esperados los días 5 o 6 de septiembre.
Rusia mantiene una presencia constante de navíos de guerra en el Mediterráneo desde el inicio de la crisis siria hace dos años y medio.