Los centros de estudios israelíes han estado investigando el aumento del poder misilístico de Hezbolá y evaluando los puntos fuertes y débiles del Ejército israelí.

Los centros de estudios israelíes han estado investigando el aumento del poder misilístico de Hezbolá y evaluando los puntos fuertes y débiles del Ejército israelí en el contexto de la preparación de una nueva guerra contra el Líbano.

En este sentido, el jefe del Cuerpo del Norte, mayor general Noam Tayfoon, afirmó que Hezbolá es la octava potencia mundial en cuanto a misiles, basándose en sus estimaciones sobre los misiles, lanzadores de cohetes y morteros que Hezbolá posee.

“Hezbolá intentará paralizar Israel en la próxima guerra,” afirmó. “Israel no puede tolerar tal parálisis durante días y semanas”.

Aunque manifestó que el Ejército israelí estaba preparado para cualquier guerra inminente, Tayfoon dijo que consideraba que la misión sería complicada, especialmente porque la mayoría de los soldados israelíes no han experimentado lo que es una lucha en el Líbano.

“Hezbolá es una organización inteligente y ha accedido al desarrollo tecnológico, así que es un enemigo peligroso”, dijo Tayfoon.

Por su parte, el jefe de la División de Tecnología y Logística del ejército sionista, mayor general Coby Barack, aseguró que Hezbolá posee misiles avanzados que pueden alcanzar los objetivos de forma precisa, como una planta de energía en el norte de la Palestina ocupada, un complejo militar en Tel Aviv o el Aeropuerto Ben Gurion.

“Los centros militares logísticos y las bases militares y navales serán también atacados”, señaló.