El presidente iraní celebró el lunes conversaciones separadas con el presidente turco y con el primer ministro en los márgenes de la Cuarta Conferencia de la ONU sobre los Países Menos Desarrollados.

El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, celebró el lunes conversaciones separadas con el presidente turco, Abdullah Gul, y con el primer ministro Recep Tayyip Erdogan en los márgenes de la Cuarta Conferencia de la ONU sobre los Países Menos Desarrollados.

No ha habido informes sobre los detalles de los encuentros.

En su discurso a la Conferencia el lunes, Ahmadineyad presentó un plan de seis puntos de Irán para reformar el “injusto” sistema mundial.

Con respecto a Siria, Ahmadineyad dijo en una conferencia de prensa en Estambul que el gobierno y el pueblo de Siria han alcanzado un nivel de madurez en lo que respecta a la resolución de sus propios problemas y no existe necesidad de injerencia extranjera, dijo la televisión estatal el martes.

El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ramin Mehmanparast, acusó el martes a los medios occidentales de exagerar los hechos en Siria. “No aceptamos una confrontación violenta en ningún caso o la represión contra los que expresan sus demandas pacíficamente,” dijo a los reporteros. Sn embargo, él acusó a los medios extranjeros de exagerar la amplitud de un “limitado movimiento de oposición”.

“A través de sus medios (occidentales), ellos intentan exagerar algunos de los limitados movimientos de oposición en Siria que pueda existir y los presentan como si fueran las demandas de la mayoría de la población.” “Incluso si se prestara atención a esta minoría y sus demandas, en el caso de que éstas fueran expresadas pacíficamente, esto serviría sólo para consolidar el gobierno”, dijo Mehmanparast.

En un encuentro con su homólogo afgano, Hamid Karzai, en los márgenes de la conferencia, Ahmadineyad dijo que la muerte de Osama bin Laden no dejaba ninguna excusa a los países occidentales para continuar su presencia militar en la región y subrayó que dichos estados deberían de poner fin a su ocupación de los estados regionales.

“Washington contempla la continuación de sus políticas anteriores en Afganistán, Pakistán e Iraq tomando en consideración sólo sus propios intereses,” añadió.

El presidente afgano, por su parte, habló sbre la muerte de Bin Laden y dijo que el tiempo estaba ya maduro para el establecimiento de una paz y seguridad en la región. Karzai alabó los vínculos “positivos” entre Irán y Afganistán y pidió que los dos países promuevan una cooperación bilateral basada en las similitudes culturales.

El presidente iraní celebró este encuentro antes de finalizar su visita de un día a Turquía y volver a casa a primera hora del martes.

En los márgenes de la conferencia, él discutió los acontecimientos regionales y globales con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, afirmando que Irán apoya el diálogo en los temas internacionales.

He aquí el texto del plan de seis puntos de Irán:

1) Prohibición de las relaciones políticas y económicas que van en una sola dirección y en las que unos pocos gobiernos mantienen una hegemonía frente a otros gobiernos y naciones. Este esquema debe ser alterado de tal forma que se incline hacia la justicia y ponga fin a todo tipo de injerencia política y militar de las potencias hegemónicas.

2) Creación de un organismo, con plenas competencias e integrado por miembros procedentes de países que son independientes del sistema capitalista, que desarrolle un mecanismo de supervisión de las políticas de los bancos centrales y ministerios de finanzas de los estados hegemonistas.

3) Elaboración de una lista detallada de los recursos naturales y económicos de los países menos desarrollados, con la cooperación de la ONU, gobiernos y naciones independientes y los propios países menos desarrollados. La lista debería ser presentada a aquellos que tengan la responsabilidad de gestionar tales recursos.

4) Creación de un comité independiente que evaluará el daño infligido durante la era del colonialismo y la esclavitud. Aquellos que infligieron el daño deberían compensar a estos países.

5) Dedicación del 10% de los presupuestos militares de los cuarenta países más grandes del mundo, que está estimado en 1,2 billones de dólares, más de la mitad de los cuales pertenece a EEUU, a proyectos de desarrollo en los países menos desarrollados.

6) Todos los países y naciones deberían tomar nota de que el permanecer firmes al lado de la justicia, el servir al pueblo, la confianza en los recursos culturales y humanos propios, la utilización de métodos propios de desarrollo y el aprovechamiento de las experiencias exitosas de las naciones independientes son las formas reales de alcanzar al progreso.

La cumbre de cinco días de la ONU, en la que participaron los 48 líderes de los Países Menos Desarrollados del Mundo, comenzó en Estambul el lunes con el fin de discutir un plan de ayuda de diez años para ayudar a sacar a estas naciones de la pobreza.

La ONU celebra una conferencia de Países Menos Desarrollados cada década. Francia albergó las primeras dos conferencias de este tipo en 1981 y 1990. La tercera tuvo lugar en Bruselas en 2001.