Rusia tiene suficientes evidencias de que el gas empleado en los ataques químicos de Guta el 21 de agosto cerca de Damasco fue de fabricación casera y no militar y fue además del mismo tipo.

Rusia tiene suficientes evidencias de que el gas empleado en los ataques químicos de Guta el 21 de agosto cerca de Damasco fue de fabricación casera y no militar y fue además del mismo tipo, aunque en una concentración mayor, que el empleado en el incidente de Jan al Assal, cerca de Alepo, por los grupos terroristas, señaló el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov.

“Con ocasión del incidente ocurrido en las cercanías de Alepo el 19 de Marzo de 2013, cuando las Naciones Unidas, bajo la presión de algunos miembros del Consejo de Seguridad, no respondieron a la petición del gobierno sirio para enviar inspectores a investigar, Rusia, a petición del gobierno sirio, envió un equipo de expertos a investigar y su informe, con el resultado de las investigaciones, está disponible para los miembros del Consejo de Seguridad y el público en general”, dijo Lavrov.

“La principal conclusión es que es que el tipo de gas sarín que fue empleado en el incidente de Guta fue casero. Nosotros tenemos también evidencias que aseguran que el tipo de gas utilizado allí el 21 de agosto es el mismo que el de Alepo, sólo que en concentraciones más altas”.

El ministro dijo que él había presentado recientemente a su homólogo norteamericano, John Kerry, estas pruebas.

“Los informes de los periodistas que visitaron los sitios y hablaron con los combatientes,señalan que éstos les dijeron que ellos habían recibido algunos tipos inusuales de misiles y municiones de un país extranjero además del gas, pero ellos no sabían cómo utilizarlo. Tenemos también las pruebas de las monjas que se hallan en un monasterio cercano y que visitaron el sitio. Además, podemos leer las evaluaciones de expertos en armas químicas que dicen que las imágenes de los vídeos no se corresponden con una situación real donde armas químicas hubieran sido utilizadas.

Asimismo conocemos una carta abierta enviada al presidente Obama por antiguos operativos de la CIA y el Pentágono que señalan que las afirmaciones de que el gobierno utilizó las armas químicas eran falsas”.