Tras imponerse casi sin resistencia en varias partes del este y norte de Siria, la milicia del así llamado Estado Islámico de Iraq y Siria (EIIS), vinculada a Al Qaida, ha amenazado a Turquía.
Tras imponerse casi sin resistencia en varias partes del este y norte de Siria, la milicia del así llamado Estado Islámico de Iraq y Siria (EIIS), vinculada a Al Qaida, ha amenazado a Turquía, mientras que sobre el terreno continúa el hundimiento del Ejército Sirio Libre tanto en el norte como en Damasco.
Según Syria Truth, el EIIS ha puesto en guardia a Ankara de que atentados suicidas serán perpetrados en su territorio si ella no abre los dos pasos fronterizos de Bab el Hawa y Bab es Salameh, cerrados desde que esta milicia lanzó la batalla contra el ESL para apoderarse de la localidad siria de Azzaz, situada a cinco kilómetros de la frontera.
“Nosotros, el Estado Islámico en Iraq y Siria, los mejores que Dios ha escogido para castigar a sus enemigos, ponemos en guardia a los hermanos de los judíos y sus aliados en el país turco y decimos que el gobierno divino se aproxima a su suelo... Nosotros declaramos, nosotros los hijos de Omar (el segundo califa) y los hermanos de Muawiya (el primer califa omeya), que los pies de los leones de la organización pura se aproximan cada vez más al país turco para difundir el mensaje sano y purificar esta tierra de los opresores y los impíos”, se dice en el comunicado del EIIS, publicado el sábado en Alepo.
El texto advierte al primer ministro Erdogan que deje de apoyar “al ESL y a los renegados del Frente al Nusra (otro grupo vinculado a Al Qaida)” y que abra los pasos fronterizos en 48 horas. “Si no, juramos que los amigos de los judíos serán quemados por el fuego de los mártires del EIIS, no sólo en Rayhaniyyé y Bab el Hawa, sino también en el corazón de Estambul y de Ankara”, amenaza el comunicado.
El EIIS revindica atentados de los que Turquía culpó a Damasco
Cabe señalar que el texto del comunicado reivindica los dos atentados que golpearon la ciudad de Rayhaniyyé, en la provincia de Iskendrun, y el paso de Bab al Hawa hace varios meses y que costaron la vida a más de 40 turcos.
Los dos atentados habían sido imputados por las autoridades turcas al gobierno sirio y en particular a sus servicios de inteligencia. Sin embargo, algunos medios turcos señalaron que los vehículos utilizados en los atentados habían sido preparados con bombas en la provincia de Raqqa, ocupada por el EIIS, y acusaron a los servicios de seguridad turcos de incompetencia por no haber podido impedir su paso.
Sobre el terreno, el ultimátum de 48 horas dirigido al grupo Batallón de la Tempestad del Norte, vinculado al ESL, en Azzaz para que entregara las armas terminó el domingo y los milicianos del EIIS entraron en la ciudad sin hallar ninguna resistencia.
Según el sitio de Tahtel Miyhar, en Alepo, el despliegue de los milicianos extremistas estuvo escoltado de dos tanques y dos vehículos blindados. Los sitios próximos al Batallón Tempestad del Norte revelan que los milicianos de este último se dirigieron hacia la frontera. Tahtel Miyhar señala que una mediación está en curso por parte de un centenar de notables de las familias de Azzaz para tratar de arreglar las diferencias entre las dos milicias.
Entretanto, el EIIS prepara un ataque contra la localidad de Afrin, dominada por el ESL, lo que le abriría la puerta norte de la ciudad de Alepo.
Milicias abandonan el ESL en la provincia de Damasco
En la Guta Oriental, las deserciones del ESL aumentan día tras día. Según el diario As Safir y Syria Truth, unas cincuenta pequeñas milicias wahabíes, próximas a Arabia Saudí, han decidido unirse bajo la bandera de una nueva milicia: “El Ejército del Islam”.
Entre estos grupúsculos armados figura la milicia Liwa al Islam, una de las grandes que operan en la provincia de Damasco. Ella está dirigida por un religioso wahabí, Zahran Allush, que cursó sus estudios en Arabia Saudí, y que mantiene lazos estrechos con el jefe de la inteligencia saudí, Bandar bin Sultan.
Según el periódico As Safir, esta milicia wahabí impone como condición a sus miembros que sean “sunníes” y tiene como objetivo el combatir la “ocupación alauí y a sus aliados shiíes”.