Omar al Atrash, acusado de planear y llevar a cabo los recientes atentados terroristas en el Suburbio del Sur de Beirut (Dahiyeh), principal bastión de Hezbolá, ha muerto en el área de Nehmat.
Omar al Atrash, acusado de planear y llevar a cabo los recientes atentados terroristas en el Suburbio del Sur de Beirut (Dahiyeh), principal bastión de Hezbolá, ha muerto en el área de Nehmat, un territorio sirio cercano a la frontera con el Líbano.
Al-Atrash y sus dos colaboradores, Ziad al-Atrash y Samer Houjairi, fallecieron cuando una granada lanzada por desconocidos alcanzó su vehículo.
Una delegación de la ciudad libanesa de Arsal, que se dirigió al escenario del incidente, identificó los cadáveres y confirmó las muertes.
Al Atrash fue el responsable de llevar a cabo los atentados de Bir al Abel y Ruwais, de asesinar a soldados libaneses en Arsal y de planear lanzar cohetes contra Dahiyeh.
El pasado 9 de Julio una potente explosión de un coche bomba despertó a los vecinos del barrio de Bir el Abed, en pleno Dahiyeh. El estallido, que se produjo en el aparcamiento de una zona comercial, dejó al menos 53 heridos por metralla y cristales reventados, según confirmó el Ministro de Sanidad libanés.
Un mes después, el 15 de Agosto, un coche bomba que contenía 50 kgs de explosivos explotó en el barrio de Ruweiss, también en Dahiyeh. Al menos 22 personas murieron y otras 336 resultaron heridas.
Arrestado el cerebro electrónico de Al Qaida en el Líbano
Por otro lado, la dirección de la Sûreté Générale ha detenido a uno de los grandes cerebros de Al Qaida en el Líbano, identificado con las siglas W.N., según indicó el periódico Al Akhbar.
“Los oficiales de la Sûreté Générale han logrado después de una larga búsqueda tender una trampa al sospechoso y arrestarle. El sospechoso fue detenido hace tres días con un falsa tarjeta de identidad que él usaba durante su paso por los controles del Ejército y las fuerzas de seguridad”, añadió Al Akhbar.
Fuentes de la seguridad le calificaron de “superprofesional en la falsificación de las tarjetas de identidad”.
“La tarjeta está hecha de una forma muy precisa y es imposible detectarla”, indicó la misma fuente.
Ella añadió que “el sospechoso es una de las personas más próximas al número uno de Al Qaida en el campo de Ain al Helwé (Sidón)”.
Conforme a las fuentes judiciales, W.N. fabricaba células electrónicas que hacen estallar explosivos a distancia. Asimismo es responsable de la fabricación de tarjetas de identidad falsas para un gran número de buscados por la Justicia libanesa.