El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Ali Akbar Salehi, anunció el miércoles que Irán y Kuwait habían decidido el regreso de sus respectivos embajadores, signo éste de una mejora en las relaciones bilate
El ministro iraní de Asuntos Exteriores, Ali Akbar Salehi, anunció el miércoles que Irán y Kuwait habían decidido el regreso de sus respectivos embajadores, signo éste de una mejora en las relaciones bilaterales.
Los dos estados han decidido que los embajadores vuelvan rápidamente a su misión en ambas capitales, declaró Salehi a los periodistas en Kuwait, donde está efectuando una visita.
Él añadió que la Alta Comisión Mixta de Cooperación debería igualmente reunirse para examinar las cuestiones relevantes y los medios de reforzar las relaciones entre los dos países amigos y vecinos, sin avanzar una fecha.
La visita de Salehi tiene lugar poco después que las relaciones entre Irán y Kuwait experimentaran un brutal enfriamiento a principios de abril después de la condena por parte de la Justicia de Kuwait de “varios miembros de una red de espionaje” acusada de trabajar para Teherán y la expulsión cruzada de diplomáticos de ambos países.
Teherán criticó vivamente el despliegue a principios de marzo de una fuerza árabe del Golfo en Bahrein para ayudar a la represión de un movimiento de contestación popular que reclama reformas políticas.
Las monarquías del Golfo contestaron acusando a la República Islámica de “injerencia” y de buscar desestabilizar la región mediante el apoyo a los levantamientos populares que sacuden el mundo árabe desde principios de año.
“Nosotros creemos que la entrada de las fuerzas armadas (del Golfo) no era necesaria. El problema habría sido arreglado en el marco bahreiní”, dijo M. Salehi, que fue recibido por el Emir de Kuwait, Sheij Sabah al Ahmed.