Fuentes próximas a Hezbolá indican que la situación en el Líbano está ligada a la de Siria.
Fuentes próximas a Hezbolá indican que la situación en el Líbano está ligada a la de Siria. El eje de la Resistencia (que incluye a Irán, Siria y Hezbolá) confía en que el gobierno sirio no caerá y señala que nadie negociará su salida ni la del presidente Bashar al Assad.
Las mismas fuentes señalan que Hezbolá, que se ha convertido en una institución que cuenta con 100.000 hombres y cuadros, está dispuesto a negociar para arreglar los problemas políticos en el Líbano.
Las mismas fuentes señalan que si se produjera una solución política en Siria, esto sería en interés del eje de la Resistencia, ya que la guerra en ese país se orientaría entonces contra los grupos takfiris (el Estado Islámico en Iraq y Siria y el Frente al Nusra).
En ese momento, estos movimientos no tendrían como arma más que los coches bomba, pero la Resistencia no aceptaría entonces ofrecer la otra mejilla.
Las fuentes de Hezbolá señalan que “la era de las concesiones se ha terminado”. En el dossier del gobierno, Hezbolá no abandonará dos cosas: el tercio de bloqueo para el 8 de Marzo y la inserción de la fórmula Ejército-Pueblo-Resistencia en la declaración ministerial del nuevo gobierno.
Hezbolá no dudará en decir a los otros protagonistas que si estas dos condiciones no se cumplan, no habrá gobierno ni siquiera en los próximos 100 años.
Las fuentes añaden que pese a la importancia de la nueva postura adoptada por Walid Yumblatt en el dossier gubernamental, que es en interés de la Coalición del 8 de Marzo, Hezbolá exige el tercio de bloqueo sin contar al Partido Socialista Progresista de Yumblatt, a fin de no depender de él en temas importantes.
Así pues, señalan las fuentes próximas a Hezbolá, “nada ocurrirá sin el acuerdo del Eje de la Resistencia que no está dispuesto a ceder ni un ápice de sus derechos”.