El presidente ruso mantuvo el jueves su primera conversación telefónica con el presidente sirio, en dos años, y aplaudió a Damasco por su voluntad a acudir a una conferencia de paz y destruir sus armas químicas.

El presidente ruso, Vladimir Putin, mantuvo el jueves su primera conversación telefónica con el presidente sirio, Bashar al Assad, en dos años, y aplaudió a Damasco por su voluntad a acudir a una conferencia de paz y destruir sus armas químicas, afirmó el Kremlin.

Putin alabó la disposición del gobierno sirio a enviar una delegación a las planeadas conversaciones de paz de Ginebra y “expresó su satisfacción” por la cooperación de Damasco en la destrucción de las armas químicas, señaló el Kremlin en una declaración.

Putin dijo que esperaba que “los principales grupos de la oposición jueguen un papel constructivo y tomen parte” en la Conferencia de Ginebra.

El portavoz de Putin, Dimitri Peskov, añadió más tarde que ésta era la primera vez que los dos líderes habían hablado desde el inicio de la crisis siria en Marzo de 2011.

“No hubo una conversación en los pasados dos años y, con esto me refiero al período de la guerra”, dijo Peskov.

Él dijo que el lado ruso había iniciado la llamada porque “justo ahora entramos en un momento muy crucial”.

La conversación telefónica se produjo poco después de que el periódico sirio Al Watan afirmara el jueves que la Conferencia de Ginebra-2 tendrá lugar el 12 de Diciembre.

El gobierno sirio ha expresado su disposición a acudir y Rusia ha denunciado la falta de entusiasmo de la oposición externa siria en participar en el evento.

El Kremlin dijo que, durante la llamada, “Assad agradeció al liderazgo ruso su ayuda y su apoyo al pueblo sirio”.

Ambos líderes mostraron su interés mutuo en continuar desarrollando las relaciones bilaterales”.