Los franceses preguntarán pronto a Hollande lo que lo que está en haciendo en favor de la paz y la seguridad internacionales teniendo en cuenta la postura que ha adoptado y que apunta a una guerra.
Fuentes diplomáticas en Beirut han lanzado fuertes críticas contra el presidente francés, François Hollande, que está ya tocado en el plano económico y disfruta de la popularidad más baja de un presidente francés desde 1958, por su postura en lo que se refiere a las sanciones contra Irán. Francia no tiene derecho a hablar de armas nucleares puesto que ayudó a crear, ya en 1952, el arsenal nuclear israelí.
En lo que respecta al dossier de Siria, estas mismas fuentes estiman que París ha constatado que ha perdido la batalla en ese país en los planos económico, financiero y petrolífero, lo que explica las presiones que ejerce sobre la Casa Blanca para que le permita compensar en Libia lo que ha perdido en Siria.
Evidentemente, Israel busca utilizar a Hollande y Francia para sus intereses. Sin embargo, al mismo tiempo, los israelíes afirman que Tel Aviv busca reforzar sus ahora delicadas relaciones con Washington. Estas fuentes afirman que Israel está jugando con el presidente francés a la espera de obtener las garantías que le ofrecerá EEUU en contrapartida si se produce un acuerdo sobre el tema nuclear de Irán.
Sin duda, los franceses preguntarán pronto a Hollande lo que lo que está en haciendo en favor de la paz y la seguridad internacionales teniendo en cuenta la postura que ha adoptado y que apunta a una guerra, y que ha sido tomada además en coordinación con las capitales que matan a niños e inocentes. La sociedad civil francesa interrogará pronto al jefe de Estado sobre su política exterior, que ha hecho a Francia perder sus privilegios económicos y financieros en varios importantes países y la ha convertido en un estado que apoya el terrorismo en Siria.
Ad Diyar