La Asociación de Estudios Americanos, una organización académica de 60 años de antigüedad, aprobó el miércoles una resolución en la que anunció su compromiso con el movimiento de boicot contra Israel.
La Asociación de Estudios Americanos, una organización académica de 60 años de antigüedad, que cuenta con 5.000 miembros, aprobó el miércoles una resolución en la que anunció su compromiso con el movimiento de boicot contra Israel.
Citando su compromiso con “la búsqueda de la justicia social” y con “la lucha contra todas las formas de racismo”, la ASA reveló en una declaración publicada en su sitio web que había decidido apoyar la campaña de BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) contra Israel.
“La Asociación de Estudios Americanos apoya el llamamiento de la sociedad civil palestina en favor de un boicot contra las instituciones académicas israelíes”, dijo la declaración.
“La ASA apoya los derechos de los estudiantes y eruditos palestinos en todas partes para llevar a cabo investigaciones y conferencias sobre el tema palestino-israelí y en apoyo al movimiento BDS”.
La ASA se refirió también al “papel significativo” jugado por EEUU “para permitir a los ocupantes israelíes de Palestina la expansión de los asentamientos ilegales y el Muro (del Apartheid) en violación del Derecho Internacional, así como el apoyo a la discriminación sistemática contra los palestinos. Esto ha tenido un impacto devastador sobre su bienestar general y el ejercicio de sus derechos humanos y civiles, incluyendo la libertad de movimiento y las oportunidades para la educación”.
El movimiento BDS ha ganado influencia en los pasados años, en que un creciente número de profesores y de entidades académicas se han comprometido con esta causa.
Más de 950 profesores y académicos que trabajan en instituciones norteamericanas han mostrado su apoyo a la Campaña a favor del Boicot Académico y Cultural de Israel.
La Asociación para los Estudios Asiático-Americanos se convirtió en la primera institución académica de EEUU en mostrar su apoyo al movimiento de boicot en abril pasado.
En Mayo, un reconocido físico, Stephen Hawking, decidió no asistir a una conferencia en Israel, citando su decisión de apoyar la campaña de boicot.