La crisis siria ha entrado en una nueva fase crítica tras el anuncio del martirio de 120 miembros de las fuerzas de seguridad en la ciudad norteña de Yisr al Shugur por parte de grupos armados.
La crisis siria ha entrado en una nueva fase crítica tras el anuncio del martirio de 120 miembros de las fuerzas de seguridad en la ciudad norteña de Yisr al Shugur por parte de grupos armados.
Según la agencia de noticias siria SANA, los grupos armados mutilaron los cuerpos de algunos policias y miembros de las fuerzas de seguridad y arrojaron los cuerpos de otros al Río Orontes, añadiendo que los grupos bloquearon carreteras, atacaron casas y aterrorizaron a los ciudadanos, además de ocupar edificios públicos y privados y destruir tiendas.
El ministro del Interior sirio, Mohammad Ibrahim al Shaar, advirtió en una declaración televisada el lunes a los grupos armados que “el Estado actuará con firmeza, con fuerza y en línea con la ley. No permanecerá con los brazos cruzados frente a los ataques contra la seguridad de la patria”.
La amenaza de represalias del ministro se produjo poco después de que la televisión estatal siria dijera que las fuerzas de seguridad que fueron atacadas acudieron a la ciudad en respuesta a los llamamientos de los residentes y que ellos fallecieron en una emboscada y una explosión en una oficina de correos.
“Los grupos armados están utilizando armas y granadas... y el pueblo de Yisr al Shugur están pidiendo al Ejército que intervenga rápidamente,” dijo la televisión estatal.
Al Shaar dijo que en los pasados días, Siria ha sido testigo de ataques armados y concentrados en las instituciones del Estado, edificios públicos y privados, comisarías de policía y centros de seguridad en varias áreas, añadiendo que el último de estos ataques había tenido lugar en Yisr al Shugur, “donde grupos terroristas armados quemaron y demolieron varias instituciones, utilizando armas, balas y granadas de mano en sus ataques contra los empleados, los civiles y los miembros del Ejército.”
La declaración continuó diciendo: “Teniendo en cuenta la responsabilidad del Estado para proteger las vidas de sus ciudadanos, civiles y miembros del Ejército, y defender las instituciones públicas, reaccionaremos con firmeza y poder y según la ley.”
“Ningún ataque armado contra la seguridad de la patria y los ciudadanos será tolerado,” concluyó Al Shaar.
El ministro de Información, Dr. Adnan Mahmud, subrayó que las unidades del Ejército llevarán a cabo su misión nacional de traer paz y seguridad a los residentes para que éstos puedan volver a sus vidas normales.