Dos incidentes han socavado la seguridad del Líbano este domingo. Ellos tuvieron lugar con pocos minutos de intervalo en el sur del país y plantean la cuestión de si ellos han sido una pura coincidencia.
Dos incidentes han socavado la seguridad del Líbano este domingo. Ellos tuvieron lugar con pocos minutos de intervalo en el sur del país y plantean la cuestión de si ellos han sido una pura coincidencia.
Incidente con soldados israelíes en la frontera
El primer incidente tuvo lugar en Ras Nakura, en la frontera libanesa, donde un soldado israelí fue muerto por disparos procedentes del Líbano.
Se trató al parecer de que un soldado libanés disparó contra una patrulla israelí que había entrado en territorio libanés, causando la muerte a un soldado israelí. Más tarde, el soldado libanés se ocultó en un bosque cercano y regresó a su base el lunes, señala el sitio libanés An Nashra, que citó una fuente militar libanesa.
Por su parte, el Ejército israelí reconoció la muerte de un soldado en la frontera y decretó una alerta máxima.
Según la agencia de información oficial libanesa ANI las fuerzas israelíes lanzaron bengalas y efectuaron vuelos sobre la región. Disparos de armas cortas y pesadas fueron escuchados también.
Por su parte, la FPNUL (Fuerza Provisional de las Naciones Unidas para el Líbano) actuó para lograr un enfriamiento de la situación.
La portavoz de la FPNU, Andrea Tinenti, declaró que la fuerza de la ONU “ha sido informada de un incidente serio a lo largo de la Línea Azul” e intentaba determinar lo que había sucedido. “El comandante de la FPNUL está en contacto con todas las partes y ha apelado a la calma”, señaló. La Línea Azul fue trazada en 2000 por la ONU poco después de la retirada israelí del Sur del Líbano tras una ocupación de 22 años.
Fuentes militares libanesas han señalado al periódico Al Akhbar que el ejército israelí había disparado contra una base militar libanesa.
El pasado 7 de agosto cuatro soldados israelíes resultaron heridos por la explosión de dos bombas poco después de que un grupo de militares sionistas penetrara 400 metros dentro del territorio del Líbano.
El ataque con las bombas fue reivindicado posteriormente por el secretario general de Hezbolá, Sayyed Hassan Nasralá.
Ataque takfiri en Sidón
Por otro lado, un doble atentado contra un campamento militar del Ejército libanés fue llevado a cabo en Sidón. Poco después del atardecer un asaltante armado atacó la instalación, pero fue abatido por los disparos de los soldados libaneses, señala una declaración del Ejército.
El otro incidente tuvo lugar unos minutos más tarde cuando un coche que transportaba a tres hombres armados llegó a otro campamento militar en Maydeliun. Uno de los terroristas descendió del vehículo y se hizo explotar cerca de un grupo de militares, matando a un capitán. Los militares abrieron entonces fuego contra el vehículo matando a los otros dos ocupantes del mismo.
Según los primeros datos de la investigación, los tres militantes eran dos libaneses y un palestino. Ellos estaban vinculados a uno de los dos terroristas que perpetraron el doble atentado contra la Embajada de Irán en Beirut en noviembre pasado y pertenecían al movimiento del clérigo salafista libanés Ahmad al Assir, en la actualidad en busca y captura.
