El Ejército sirio tendió ayer dos emboscadas en la región montañosa de Qalamún, situada al norte de Damasco, a militantes sirios matando a 200 de ellos.
El Ejército sirio tendió ayer dos emboscadas en la región montañosa de Qalamún, situada al norte de Damasco, a militantes sirios matando a 200 de ellos. La primera tuvo lugar entre la localidad histórica cristiana de Maalula y Kastal y costó la vida a varias decenas de milicianos.
Según la cadena Asia News, 150 militantes muertos y heridos fueron transportados hacia la localidad libanesa de Ersal, próxima a Qalamún.
Más tarde, ese día, la agencia informó de una segunda embocada cercana a la ciudad de Qara, no lejos de la autopista internacional. Algunas bombas colocadas en el lugar fueron accionadas cuando los milicianos se encontraban en el lugar. Varias decenas de ellos resultaron muertos y heridos, y estos últimos fueron hechos prisioneros.
Los militantes muertos eran miembros de Liwa al Islam, uno de los principales grupos salafistas en la rebelión siria.
La televisión siria mostró imágenes de la primera emboscada y de los cuerpos de los militantes, que tenían fusiles ametralladores y lanzagranadas junto a ellos.
“Había unos 400 de nosotros, incluyendo saudíes, chechenos y de otras nacionalidades”, dijo un combatiente herido a un periodista de la televisión estatal.
El periodista dijo que el Ejército localizó a los combatientes durante la noche y les tendió una emboscada cuando se dirigían a la ciudad de Yairud.