Los presidentes iraní y chino se han reunido en los márgenes de la 10 cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (Organización de Cooperación de Shanghai) en Kazajstán.
Los presidentes iraní y chino se han reunido en los márgenes de la 10 cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai (Organización de Cooperación de Shanghai) en Kazajstán. Durante las conversaciones, ambos líderes discutieron la expansión de relaciones entre Teherán y Pekín y otras cuestiones regionales e internacionales.
Ahmadineyad y el presidente ruso, Dimitri Medvedev, celebraron asimismo un encuentro en los márgenes de la cumbre. Durante el mismo, el presidente Ahmadineyad expresó la importancia de los papeles de Irán y Rusia en los acontecimientos regionales y globales y pidió el reforzamiento de la cooperación entre Teherán y Moscú.
“Rusia busca reforzar sus vínculos con Irán en los diferentes sectores políticos, económicos y culturales,” dijo, por su parte, Medvedev.
El presidente iraní se reunió poco antes con sus homólogos de Kazajstán, Nursultan Nazarbayev, y de Pakistán, Asif Ali Zardari.
Ahmadineyad se reunió también con expatriados iraníes que residen en Kazajstán.
La cumbre de la OCS se inició el miércoles en Astana.
La organización, que agrupa a China, Rusia, Kazajstán, Tayikistán, Uzbekistán y Kirguizistán, es una organización intergubernamental de seguridad fundada en 2001 por los líderes de las seis naciones.
Irán, Pakistán, India y Mongolia tienen puestos de observador en la OCS.
Afganistán también ha participado en algunas cumbres de la OCS como invitado.
Irán ha buscado convertirse en miembro de pleno derecho de la OCS ya que esto permitiría al país crear una poderosa coalición con China y Rusia.
Los analistas políticos consideran a la OCS como el futuro contrapeso a la creciente influencia de la OTAN en los asuntos de Eurasia.