Irán ha recibido los primeros frutos concretos de su política de diálogo con el próximo desbloqueo de 550 millones de dólares como está previsto en el acuerdo nuclear de Ginebra.
Irán ha recibido los primeros frutos concretos de su política de diálogo con el próximo desbloqueo de 550 millones de dólares como está previsto en el acuerdo nuclear de Ginebra, lo que tendrá un efecto psicológico inmediato y permitirá un relanzamiento de su economía, según los expertos.
El acuerdo concluido con las grandes potencias a finales de noviembre es el resultado de intensas negociaciones iniciadas después de la victoria el pasado mes de junio del presidente iraní, Hassan Rohani. Él prevé que Teherán congelará a partir del 20 de enero y durante seis meses una parte de sus actividades nucleares sensibles a cambio de un levantamiento parcial de las sanciones.
Los países del Grupo 5+1 (China, EEUU, Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania) deben, en contrapartida, levantar las sanciones sobre las exportaciones petroquímicas y el comercio de oro, mantener las exportaciones de petróleo iraníes a su nivel actual, levantar las sanciones contra la industria automovilística y desbloquear gradualmente 4.200 millones de dólares de activos iraníes congelados en EEUU. Teherán deberá recibir a principios de febrero un primer envío de 550 millones de dólares, según el Departamento de Estado.
“La suma total de 4.200 millones no es algo grande en sí mismo”, dijo el experto económico Said Leylaz a AFP recordando que Irán ha vendido 34.000 millones de dólares en petróleo en los nueve últimos meses. Sin embargo, él cree que el efecto político y psicológico del levantamiento de estas sanciones será considerable. “Vamos a vender más fácilmente nuestro petróleo y productos petroquímicos y a recuperar nuestros petrodólares. Vamos también a adquirir hasta un 10% más baratos los productos que compramos al exterior”.
Relanzar la producción
El embargo petrolífero y financiero impuesto en enero de 2011 por EEUU y la Unión Europea contra Irán ha tenido efectos negativos en la economía iraní. El acuerdo prevé asimismo la creación de canales bancarios para facilitar los intercambios comerciales de Irán con el mundo exterior.
El experto cree que se producirá un alza de 20.000 a 25.000 millones de dólares anuales en los ingresos petrolíferos del Estado, lo que permitirá a éste controlar mejor la inflación y responder a las necesidades inmediatas de la población.
Para Mohsen Gamsari, director de relaciones internacionales de la Compañía Nacional de Petróleo, la entrada en aplicación del acuerdo va a permitir un incremento de las exportaciones de petróleo.
Irán ha aumentado ya las exportaciones de crudo en estos últimos meses hasta unos 1,3 o 1,4 millones de barriles al día, frente a los 1,2 millones anteriores.
“Con estos ingresos suplementarios, el gobierno podrá importar los productos de consumo de los que tiene necesidad la población y los productos intermedios que son precisos para incrementar la producción”, explica Mohammad Reza Behzadian, antiguo director de la Cámara de Comercio de Teherán.
“El gobierno va a poder pagar sus deudas a las empresas privadas, lo que dará un mayor ímpetu a la economía”, subrayó. El levantamiento de las sanciones al sector automovilísticos tendrá igualmente un importante impacto, mientras que la producción de vehículos ha bajado a menos de la mitad (de.1,6 millones en 2011 a 800.000 en 2012).
“Nosotros podremos alcanzar en 2016 nuestro nivel de producción de 2011. Además, vamos, sobre todo, a tener acceso a las tecnologías nuevas,” dijo Leylaz.
“La economía iraní muestra signos de una recuperación, tras años de sanciones, debido en gran parte al levantamiento parcial de algunas sanciones previsto por el acuerdo de Ginebra, a un cambio psicológico en los mercados y a la percepción de que la Administración Obama está decidida a no imponer nuevas sanciones económicas contra Irán”, escribió el economista estadounidense Mark Dubowitz en una tribuna pública en el periódico iraní en inglés Iran Daily.