22-11-2024 12:11 PM Tiempo de Jerusalén

EEUU negoció en secreto con narcotraficantes mexicanos

EEUU negoció en secreto con narcotraficantes mexicanos

Funcionarios del gobierno de Estados Unidos negociaron de forma secreta con el cártel de drogas de Sinaloa, México, a cambio de información sobre organizaciones rivales de narcotraficantes, destacan hoy medios de prensa.

Funcionarios del gobierno de Estados Unidos negociaron de forma secreta con el cártel de drogas de Sinaloa, México, a cambio de información sobre organizaciones rivales de narcotraficantes, destacan hoy medios de prensa.

Declaraciones presentadas ante la Corte de Distrito de Chicago por un agente de la Administración de Control de Drogas (DEA) y el departamento de Justicia indican que funcionarios federales se reunieron al menos durante 50 ocasiones con jefes del mencionado cártel a partir del año 2000.

Agentes de la DEA exigieron información sobre bandas rivales y al mismo tiempo construir una red de informantes a cambio de un acuerdo de cooperación de drogas que les permitiría a los contrabandistas mexicanos obtener beneficios futuros, incluyendo la cancelación de cargos en Estados Unidos, indican los textos.

En virtud de dicho trato, Jesús Vicente Zambada-Niebla, hijo del jefe del cártel de Sinaloa, Ismael "El Mayo" Zambada solicitó inmunidad y desestimar cualquier procesamiento dada su cooperación con Washington, tras ser extraditado a Chicago a principios de 2010.

En la causa abierta contra Zambada-Niebla se explicita que su padre, el jefe del cartel de Sinaloa, lo autorizó a colaborar con las autoridades estadounidenses a cambio de beneficios en el negocio de las drogas y gozar de inmunidad.

Según el diario The Huffington Post, los agentes estadounidenses efectuaron dichas negociaciones secretas sin informar a las autoridades mexicanas, como estipulan los acuerdos bilaterales con ese país.

Hasta el momento, la DEA ha evitado hacer comentarios al respecto.

The Huffington Post se basa en una investigación del diario mexicano El Universal donde se determinó que la relación entre funcionarios del gobierno federal norteamericano y narcotraficantes alcanzó su apogeo entre 2006 y 2012, cuando se apretaron las clavijas alrededor de varias organizaciones criminales.

Se desconoce si en la actualidad existen acuerdos similares.

Zambada Niebla también alegó que la fallida Operación Rápido y Furioso, que destapó un agudo escándalo en 2011, fue un acuerdo de Estados Unidos para financiar y armar a los integrantes del cártel de Sinaloa a cambio de información sobre los rivales.

Mediante dicha operación, la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos puso deliberadamente unas dos mil 500 armas de asalto en manos de narcotraficantes mexicanos para seguir la pista y recolectar inteligencia, sin informar al gobierno mexicano.

Sí esta claro que los capos de Sinaloa poseen un marcado poder de influencia en Estados Unidos, al controlar el suministro del 80 por ciento de la heroína, cocaína, marihuana y la metanfetamina consumida solo en el área de Chicago, comercio valorado en unos tres mil millones de dólares, refieren cifras de la propia DEA.